Cantautor Miguel Ángel Olivares conversa con LA PRIMERA. Este 8 de mayo presenta su último disco en el auditorio de la USP
Heredero del movimiento cultural y musical surgido en Cuba en los años sesenta, Miguel Ángel Olivares compone canciones que parten del folklore natural de una ciudad como la nuestra que tiene muchas demandas sociales insatisfechas. El compromiso social está claramente marcado en su primera entrega “Urgencia de todos”, donde las veinte canciones tienen la misma carga emocional. En su reciente trabajo: “Oasis del desierto” la temática gira hacia la naturaleza. Pero mejor dejemos que él mismo nos cuente brevemente su historia.
¿Desde cuándo compones y haces nueva trova?
En realidad siempre me gustó hacer canciones, pero más formalmente tengo 8 años componiendo.
¿Cuáles son los principales espacios donde te has presentado?
Me tocado en varias ciudades como Barranco, Lima, Guayaquil, Quito, Pasto y La Plata. Pero sobre todo toco en eventos políticos y culturales.
¿Por qué hacer nueva trova y no otro género musical?
Porque considero que las letras y actitudes creativas deben partir de la inspiración en que se construyen los acontecimientos que rodean al movimiento social del país. En la trova se revelan las esencias genéticas de orden musical y literario de la cultura latinoamericana, desarrolladas creativamente, amplificadas, multiplicadas, en el más amplio sentido de la palabra.
¿Cuándo es el concierto acústico que vas a ofrecer a los amantes de la trova?
Este 8 de mayo en el auditorio de la Universidad San Pedro, esquina de Espinar y Aguirre, voy a presentar mi último CD “Oasis del desierto” con un recital de nueva trova. Espero que el público nos acompañe.
EL DATO
El ingreso al concierto de nueva trova de este 8 de mayo es completamente libre. La presentación del último trabajo discográfico de Miguel Olivares estará a cargo del poeta y editor Jaime Guzmán Aranda y del artista plástico Amarildo Obeso Sánchez.
miércoles, 30 de abril de 2008
martes, 29 de abril de 2008
Casusol: la nueva promesa literaria de Chimbote
Conversa con el autor de “Amistad temporal”, quien a sus 16 años de edad apunta lejos en la nueva narrativa chimbotana.
¿De dónde surge tu vicio por la escritura?
Desde muy niño tengo la necesidad biológica de hacerlo, si no lo hago no tiene mucho sentido mi vida. No me imagino haciendo otra cosa, es una pasión infinita.
¿Por qué prefieres el realismo urbano?
Un escritor que me ha educado es Julio Ramón Ribeyro, me gusta su sencillez para narrar, me fascinan los cuentos donde se aborda la temática urbana porque Chimbote es una ciudad con muchos problemas y un escritor no puede estar al margen de ellos. Otro escritor que me ha marcado es Edgar Alan Poe, su narrativa hizo que mi condición de niño madurara de un modo singular.
¿Cómo surgen los cuentos de tu libro “Amistad temporal”?
En realidad los escribí hace mucho tiempo y los he publicado tal cual los concebí. No he tocado casi nada esos textos, creo que porque no deseo que se pierda el sentido original de cómo fueron escritos. Felizmente el municipio provincial me apoyó para publicar el libro.
Tú eres un escritor joven casi desconocido aquí pero en Lima te han entrevistado en El Peruano, en TNP y en otros medios…Eso es parte del aprecio de mi amigo Carlos Calderón Fajardo, él me presentó a algunos periodistas a quienes les interesó mi trabajo narrativo y bueno me entrevistaron.
¿Desde cuándo eres tan amigo del notable narrador Carlos Calderón Fajardo?
Lo conocí en la Feria del Libro de Nuevo Chimbote realizada el año pasado. Él presentó un libro de crónicas y desde entonces nos hemos hecho muy amigos, tanto que me ha presentado a muchos escritores importantes del país durante mi reciente estancia en Lima.
¿Estás escribiendo algo nuevo?
Sí, alisto un nuevo volumen pero no me apuro a publicarlo.
EL DATO
Amistad temporal (Río Santa, 2007) es el título del libro de cuentos de este escritor adolescente que aún cursa en quinto grado de secundaria en el colegio Víctor Andrés Belaúnde. Casusol también está incluido en el volumen de relatos “La santa cede”.
¿De dónde surge tu vicio por la escritura?
Desde muy niño tengo la necesidad biológica de hacerlo, si no lo hago no tiene mucho sentido mi vida. No me imagino haciendo otra cosa, es una pasión infinita.
¿Por qué prefieres el realismo urbano?
Un escritor que me ha educado es Julio Ramón Ribeyro, me gusta su sencillez para narrar, me fascinan los cuentos donde se aborda la temática urbana porque Chimbote es una ciudad con muchos problemas y un escritor no puede estar al margen de ellos. Otro escritor que me ha marcado es Edgar Alan Poe, su narrativa hizo que mi condición de niño madurara de un modo singular.
¿Cómo surgen los cuentos de tu libro “Amistad temporal”?
En realidad los escribí hace mucho tiempo y los he publicado tal cual los concebí. No he tocado casi nada esos textos, creo que porque no deseo que se pierda el sentido original de cómo fueron escritos. Felizmente el municipio provincial me apoyó para publicar el libro.
Tú eres un escritor joven casi desconocido aquí pero en Lima te han entrevistado en El Peruano, en TNP y en otros medios…Eso es parte del aprecio de mi amigo Carlos Calderón Fajardo, él me presentó a algunos periodistas a quienes les interesó mi trabajo narrativo y bueno me entrevistaron.
¿Desde cuándo eres tan amigo del notable narrador Carlos Calderón Fajardo?
Lo conocí en la Feria del Libro de Nuevo Chimbote realizada el año pasado. Él presentó un libro de crónicas y desde entonces nos hemos hecho muy amigos, tanto que me ha presentado a muchos escritores importantes del país durante mi reciente estancia en Lima.
¿Estás escribiendo algo nuevo?
Sí, alisto un nuevo volumen pero no me apuro a publicarlo.
EL DATO
Amistad temporal (Río Santa, 2007) es el título del libro de cuentos de este escritor adolescente que aún cursa en quinto grado de secundaria en el colegio Víctor Andrés Belaúnde. Casusol también está incluido en el volumen de relatos “La santa cede”.
Miguel Olivares alista recital acústico de nueva trova
Para el 8 de mayo próximo a las siete de la noche está programado el recital acústico de nueva trova de Miguel Ángel Olivares, en el auditorio de la Universidad Privada San Pedro, ubicado en la esquina de los jirones Elías Aguirre y Espinar. En la cita se presentará oficialmente el dvd “Oasis del desierto”, así como el disco “Urgencia de todos”, trabajos discográficos y en formato de vídeo que el cantautor y trovador chimbotano ha grabado recientemente.
El lanzamiento de ambas producciones estará a cargo del poeta Jaime Guzmán Aranda y del reconocido artista plástico Amarildo Obeso. Entre los invitados especiales podemos citar al guitarrista Freddy Escudero y a la soprano Marlene Silva. Olivares, a pesar de su juventud, es un antiguo habitante de la escena musical de la ciudad.
El lanzamiento de ambas producciones estará a cargo del poeta Jaime Guzmán Aranda y del reconocido artista plástico Amarildo Obeso. Entre los invitados especiales podemos citar al guitarrista Freddy Escudero y a la soprano Marlene Silva. Olivares, a pesar de su juventud, es un antiguo habitante de la escena musical de la ciudad.
"Formas y colores" en el Centenario
I Salón de Artes Plásticas reúne a más de 20 pintores y escultores de todo el país. Muestra estará abierta hasta el 22 del presente.
Este viernes a las 7 de la noche se inaugura en los amplios ambientes del Centro Cultural Centenario (avenida Alfonso Ugarte Nº 800) el I Salón de Artes Plásticas “Formas y colores”, evento que cuenta con la participación de más de veinte pintores y escultores llegados de diversos puntos del país, algunos de los cuales (los ancashinos) estarán participando de la III Feria de Arte Iberoamericano en Madrid, a realizarse en los próximos meses en el viejo continente.
Entre los principales artistas presentes con sus trabajos en la exposición podemos citar a Alfredo Alcalde, Renato Sifuentes, Víctor Chinchayán, Teófilo Villacorta, Quintín Borra, Rusbell García, Cristhian Acuña, Germán Díaz, Manuel Miranda, Humberto Jiménez, Luis Norabuena, entre otros pintores y escultores provenientes de Puno, Piura, Trujillo, Huarmey, Chimbote y Lima.
“Este es un nuevo esfuerzo para difundir a nuestros plásticos chimbotanos y a sus pares de todo el país. En Chimbote contamos con artistas de gran nivel y esta exposición es una muestra de ello. Esperamos a todos en el Centro Cultural Centenario”, señaló Silvia Diestra, administradora del mencionado espacio cultural.
Por su parte, el coordinador del evento, Santiago Machado, hizo hincapié en las figuras de la plástica que estarán presentes con sus trabajos en la exposición. “No todos los días tenemos entre nosotros a Alfredo Alcalde, un pintor chimbotano que ha expuesto en todas las capitales del mundo. Por eso convocamos a todo el público de la escena cultural de Chimbote a que nos acompañen este viernes en la inauguración, el ingreso es libre”, subrayó nuestro interlocutor.
EL DATO
Diversos materiales de trabajo han usado los escultores presentes en la exposición, entre las cuales podemos citar a la madera, piedra y fibra de vidrio. Un movimiento inusual tiene por estos días el Centro Cultural con el traslado de cuadros y la instalación de los mismos de cara a la inminente inauguración programada para este fin de semana.
Este viernes a las 7 de la noche se inaugura en los amplios ambientes del Centro Cultural Centenario (avenida Alfonso Ugarte Nº 800) el I Salón de Artes Plásticas “Formas y colores”, evento que cuenta con la participación de más de veinte pintores y escultores llegados de diversos puntos del país, algunos de los cuales (los ancashinos) estarán participando de la III Feria de Arte Iberoamericano en Madrid, a realizarse en los próximos meses en el viejo continente.
Entre los principales artistas presentes con sus trabajos en la exposición podemos citar a Alfredo Alcalde, Renato Sifuentes, Víctor Chinchayán, Teófilo Villacorta, Quintín Borra, Rusbell García, Cristhian Acuña, Germán Díaz, Manuel Miranda, Humberto Jiménez, Luis Norabuena, entre otros pintores y escultores provenientes de Puno, Piura, Trujillo, Huarmey, Chimbote y Lima.
“Este es un nuevo esfuerzo para difundir a nuestros plásticos chimbotanos y a sus pares de todo el país. En Chimbote contamos con artistas de gran nivel y esta exposición es una muestra de ello. Esperamos a todos en el Centro Cultural Centenario”, señaló Silvia Diestra, administradora del mencionado espacio cultural.
Por su parte, el coordinador del evento, Santiago Machado, hizo hincapié en las figuras de la plástica que estarán presentes con sus trabajos en la exposición. “No todos los días tenemos entre nosotros a Alfredo Alcalde, un pintor chimbotano que ha expuesto en todas las capitales del mundo. Por eso convocamos a todo el público de la escena cultural de Chimbote a que nos acompañen este viernes en la inauguración, el ingreso es libre”, subrayó nuestro interlocutor.
EL DATO
Diversos materiales de trabajo han usado los escultores presentes en la exposición, entre las cuales podemos citar a la madera, piedra y fibra de vidrio. Un movimiento inusual tiene por estos días el Centro Cultural con el traslado de cuadros y la instalación de los mismos de cara a la inminente inauguración programada para este fin de semana.
domingo, 27 de abril de 2008
Cine foro en Universidad San Pedro
Films para todos los gustos en Nuevo Chimbote
Un interesante Cine Foro, denominado “Aplicación de la Audiovisión Crítica”, se desarrolla a partir del jueves 24 de abril en el auditorio de la biblioteca central de la Facultad de de Educación y Humanidades de la Universidad San Pedro, el mismo que permite el visionado de films de importantes directores contemporáneos como Oliver Dahan, Martin Scorsese, Jason Reitman, Paul Thomas Anderson y los hermanos Cohen.
El ciclo, dividido en tres segmentos (películas ganadoras del cuestionado premio Óscar de la Academia, films europeos y norteamericanos, intenta analizar la manera de ver el mundo de una serie de directores mediáticamente conocidos pero no necesariamente rescatables. Este evento cultural se prolonga hasta el 17 de julio próximo.
Un interesante Cine Foro, denominado “Aplicación de la Audiovisión Crítica”, se desarrolla a partir del jueves 24 de abril en el auditorio de la biblioteca central de la Facultad de de Educación y Humanidades de la Universidad San Pedro, el mismo que permite el visionado de films de importantes directores contemporáneos como Oliver Dahan, Martin Scorsese, Jason Reitman, Paul Thomas Anderson y los hermanos Cohen.
El ciclo, dividido en tres segmentos (películas ganadoras del cuestionado premio Óscar de la Academia, films europeos y norteamericanos, intenta analizar la manera de ver el mundo de una serie de directores mediáticamente conocidos pero no necesariamente rescatables. Este evento cultural se prolonga hasta el 17 de julio próximo.
Piden que Pomabamba sea declarada capital folklórica de Áncash
Residentes en Chimbote exigen al GRA
La Asociación de Pomabambinos residentes en la provincia del Santa, demandaron ayer que su ciudad natal sea declarada “Capital Folklórica de Áncash” en virtud a la enorme variedad de danzas que se practican en la zona, algunas lamentablemente en extinción por falta de una política de protección a las actividades artísticas del país.
El presidente de la citada asociación, Leoncio Romero Ponte, instó al Gobierno Regional a frenar la agresión foránea que pretende borrar las ricas experiencias de nuestro pasado, la mayoría de los cuales se expresa a través del folklore. “Si Pomabamba recibe tal nombramiento oficial se contribuirá a difundir los valores de nuestro pueblo y se promoverá el turismo a la zona”, subrayó nuestro interlocutor.
La Asociación de Pomabambinos residentes en la provincia del Santa, demandaron ayer que su ciudad natal sea declarada “Capital Folklórica de Áncash” en virtud a la enorme variedad de danzas que se practican en la zona, algunas lamentablemente en extinción por falta de una política de protección a las actividades artísticas del país.
El presidente de la citada asociación, Leoncio Romero Ponte, instó al Gobierno Regional a frenar la agresión foránea que pretende borrar las ricas experiencias de nuestro pasado, la mayoría de los cuales se expresa a través del folklore. “Si Pomabamba recibe tal nombramiento oficial se contribuirá a difundir los valores de nuestro pueblo y se promoverá el turismo a la zona”, subrayó nuestro interlocutor.
Primera novela de Braulio Muñoz al inglés
Alejandro and the fishermen of Tancay
The University of Arizona acaba de anunciar el próximo lanzamiento de la traducción al inglés de la novela del chimbotano Braulio Muñoz “Alejandro y los pescadores de Tancay”, libro que aborda la problemática ecológica de Chimbote bajo la interesante mirada de los pescadores de peña de la zona del Campamento Atahualpa.
Como se recuerda, el libro fue publicado originalmente por Andrea Lippolis Editore (Italia) en 2004, posteriormente apareció la segunda y tercera edición publicadas en Chimbote (Universidad Los Á ngeles y Rúi Santa Editores), la cuarta publicada en Lima por Editorial San Marcos y ahora esta quinta entrega llega desde Estados Unidos y en el idioma anglosajón. Este no es el primer libro de Muñoz traducido al inglés, anteriormente han sido publicados otros dos volúmenes de ensayo y su novela “The peruvian notebooks”.
* En la vista, portada de la primera edición italina de la novela de Muñoz.
The University of Arizona acaba de anunciar el próximo lanzamiento de la traducción al inglés de la novela del chimbotano Braulio Muñoz “Alejandro y los pescadores de Tancay”, libro que aborda la problemática ecológica de Chimbote bajo la interesante mirada de los pescadores de peña de la zona del Campamento Atahualpa.
Como se recuerda, el libro fue publicado originalmente por Andrea Lippolis Editore (Italia) en 2004, posteriormente apareció la segunda y tercera edición publicadas en Chimbote (Universidad Los Á ngeles y Rúi Santa Editores), la cuarta publicada en Lima por Editorial San Marcos y ahora esta quinta entrega llega desde Estados Unidos y en el idioma anglosajón. Este no es el primer libro de Muñoz traducido al inglés, anteriormente han sido publicados otros dos volúmenes de ensayo y su novela “The peruvian notebooks”.
* En la vista, portada de la primera edición italina de la novela de Muñoz.
Concurso de Mandalas en Nuevo Chimbote
Quien sabe muchos no sepan en qué consiste el Mandala, su significado y las virtudes que encierra. El Mandala es originario de la India, pero también se han hallado representaciones similares en diversas culturas de América y Oceanía. “Son representaciones geométricas y simbólicas del universo en el Brahamanismo y el Budismo, un arte milenario que permite por medio de un soporte gráfico llegar a la meditación y a la concentración, para exprimir nuestra propia naturaleza y creatividad”, a decir del profesor de arte Sixtilio Rojas Gamboa, responsable del evento.
La Institución Educativa “Jesús Maestro” de Nuevo Chimbote organizará del 16 al 18 de mayo un concurso de Mandalas con la participación de todo su estudiantado así como de invitados especiales de otros centros educativos.
La Institución Educativa “Jesús Maestro” de Nuevo Chimbote organizará del 16 al 18 de mayo un concurso de Mandalas con la participación de todo su estudiantado así como de invitados especiales de otros centros educativos.
"Los lectores van llegando poco a poco"
Director de centro lector reconoce debilidades en la difusión de las bondades y actividades culturales que realiza su representada
El director de la Biblioteca Municipal “César Vallejo y Centenario”, Paulino Meléndez de la Cruz, desmintió ayer las versiones que hace unos días circularan en la prensa local en el sentido de que su centro de trabajo tiene una ínfima cantidad de lectores. Nuestro interlocutor declaró a este blogger que si bien es cierto durante los tres primeros meses la Biblioteca no tenía casi lectores debido a su nueva ubicación y al reciente traslado de la avenida Gálvez, poco a poco los lectores –sobre todo de colegios cercanos- han ido llegando.
“En marzo tuvimos 2,800 lectores en nuestras salas y las visitas que tuvimos ese mismo mes fueron de similar cantidad. Los usuarios llegan mayormente en las tardes a excepción de la sala infantil, que junto con el ambiente escolar son los espacios más visitados. El fondo bibliográfico es la sala de niños asciende a 1,070 libros, la escolar tiene 800, la de humanidades 8 mil y la de ciencias 2 mil títulos. Eso sin contar con los libros que faltan catalogar y que hacen un total de 14 mil volúmenes. Hay que tener en cuenta que antes de la mudanza habían 10 mil libros”, añadió nuestro interlocutor.
¿Y entonces por qué no vemos lectores en la salas?, preguntamos. Meléndez reconoció que la principal debilidad de la biblioteca era la escasa difusión de sus bondades y actividades culturales que se realizan; sin embargo destacó como virtud la amplia infraestructura, libros nuevos y estantería abierta. “Ya hemos emitido 250 carnés para los nuevos usuarios. Vamos a colocar paneles de publicidad en el estadio Centenario y difundiremos spots de TV. Esperamos que la gente tome conciencia”, añadió.
EL DATO
Un total de 40 personas, entre bibliotecarios, apoyo, vigilancia, practicantes y personal de limpieza y voluntarios laboran en la nueva biblioteca ubicada al interior del Centro Cultural Centenario en la cuadra ocho de la avenida Alfonso Ugarte. Cabe recordar que en diciembre pasado se produjo la esperada mudanza del viejo a inaparente local de los altos del Mercado de Peces en la avenida Gálvez.
El director de la Biblioteca Municipal “César Vallejo y Centenario”, Paulino Meléndez de la Cruz, desmintió ayer las versiones que hace unos días circularan en la prensa local en el sentido de que su centro de trabajo tiene una ínfima cantidad de lectores. Nuestro interlocutor declaró a este blogger que si bien es cierto durante los tres primeros meses la Biblioteca no tenía casi lectores debido a su nueva ubicación y al reciente traslado de la avenida Gálvez, poco a poco los lectores –sobre todo de colegios cercanos- han ido llegando.
“En marzo tuvimos 2,800 lectores en nuestras salas y las visitas que tuvimos ese mismo mes fueron de similar cantidad. Los usuarios llegan mayormente en las tardes a excepción de la sala infantil, que junto con el ambiente escolar son los espacios más visitados. El fondo bibliográfico es la sala de niños asciende a 1,070 libros, la escolar tiene 800, la de humanidades 8 mil y la de ciencias 2 mil títulos. Eso sin contar con los libros que faltan catalogar y que hacen un total de 14 mil volúmenes. Hay que tener en cuenta que antes de la mudanza habían 10 mil libros”, añadió nuestro interlocutor.
¿Y entonces por qué no vemos lectores en la salas?, preguntamos. Meléndez reconoció que la principal debilidad de la biblioteca era la escasa difusión de sus bondades y actividades culturales que se realizan; sin embargo destacó como virtud la amplia infraestructura, libros nuevos y estantería abierta. “Ya hemos emitido 250 carnés para los nuevos usuarios. Vamos a colocar paneles de publicidad en el estadio Centenario y difundiremos spots de TV. Esperamos que la gente tome conciencia”, añadió.
EL DATO
Un total de 40 personas, entre bibliotecarios, apoyo, vigilancia, practicantes y personal de limpieza y voluntarios laboran en la nueva biblioteca ubicada al interior del Centro Cultural Centenario en la cuadra ocho de la avenida Alfonso Ugarte. Cabe recordar que en diciembre pasado se produjo la esperada mudanza del viejo a inaparente local de los altos del Mercado de Peces en la avenida Gálvez.
sábado, 26 de abril de 2008
John López: entre la chicha y la poesía
Joven poeta chimbotano alista poemario donde aborda el polémico género musical “para hacer entrar en razón a la conciencia pública”
Autor del poemario “Inicio del mundo”, John López dialogó con este blogger de su nuevo libro basado en la música y experiencia chicha.
¿Qué tienen en común la cumbia peruana y la poesía?
La cumbia peruana, mal llamada “chicha” y la poesía tienen en común la libertad, es la expresión de existencia del individuo que merodea por las calles o aquel que está sentado, en muchos casos sin trabajo, y pensando que hará al día siguiente. La cumbia es poesía porque sirve para atacar y entrar en razón a la conciencia pública.
¿Por qué decidiste hacer un poemario basado en temas musicales que tienen más de 30 años?
En realidad siempre quise hacerlo. Lo descubrí la primera vez que escuché al Grupo Celeste y al Cuarteto Continental mientras crecía en un barrio totalmente andinizado en los años 90’ de Chimbote. Esto marcó mi infancia, el tipo de música que atrapaba al baile desde el primer sonido del timbal, la guitarra eléctrica o las prodigiosas voces de Chacalón, Julio Mau, Claudio Morán o Chapulín.
Luego de analizar las letras de los grupos de cumbia para armar tu libro, ¿a qué referentes nos acercan?
El tema “cumbia peruana” no es cotidiano, redundante y mucho menos elitista. El Cuarteto Continental, Maravilla, Chacalón, Celeste y los Shapis hacen referencia a la opresión de las élites que existieron y existen en el Perú. La cumbia es la única que se atrevió a usar parte de la antropología cultural de un país que no tiene definidas sus formas culturales y muestra de ello es Chacalón, quien obtuvo un premio importante en la UNESCO en 1987 con una de sus canciones emblemáticas dirigidas a los niños pobres del Perú.
¿Cuándo vamos a tener “Carpa Grau” entre manos?
Aún no lo sé, sigo corrigiendo, agregando y quitando poemas. En realidad uno nunca termina de escribir un poema y menos un libro que fue una vida.
EL DATO“Carpa Grau” será una especie de libro long-play con treinta poemas que a su vez fueron éxitos musicales de los grupos de cumbia que marcaron historia en el Perú y Latinoamérica. Es una suerte de libro musical y autobiográfico para los iniciadores de la cumbia peruana, haciéndose un paréntesis en la vida de dos jóvenes provincianos que conocen y disfrutan este tipo de música.
Autor del poemario “Inicio del mundo”, John López dialogó con este blogger de su nuevo libro basado en la música y experiencia chicha.
¿Qué tienen en común la cumbia peruana y la poesía?
La cumbia peruana, mal llamada “chicha” y la poesía tienen en común la libertad, es la expresión de existencia del individuo que merodea por las calles o aquel que está sentado, en muchos casos sin trabajo, y pensando que hará al día siguiente. La cumbia es poesía porque sirve para atacar y entrar en razón a la conciencia pública.
¿Por qué decidiste hacer un poemario basado en temas musicales que tienen más de 30 años?
En realidad siempre quise hacerlo. Lo descubrí la primera vez que escuché al Grupo Celeste y al Cuarteto Continental mientras crecía en un barrio totalmente andinizado en los años 90’ de Chimbote. Esto marcó mi infancia, el tipo de música que atrapaba al baile desde el primer sonido del timbal, la guitarra eléctrica o las prodigiosas voces de Chacalón, Julio Mau, Claudio Morán o Chapulín.
Luego de analizar las letras de los grupos de cumbia para armar tu libro, ¿a qué referentes nos acercan?
El tema “cumbia peruana” no es cotidiano, redundante y mucho menos elitista. El Cuarteto Continental, Maravilla, Chacalón, Celeste y los Shapis hacen referencia a la opresión de las élites que existieron y existen en el Perú. La cumbia es la única que se atrevió a usar parte de la antropología cultural de un país que no tiene definidas sus formas culturales y muestra de ello es Chacalón, quien obtuvo un premio importante en la UNESCO en 1987 con una de sus canciones emblemáticas dirigidas a los niños pobres del Perú.
¿Cuándo vamos a tener “Carpa Grau” entre manos?
Aún no lo sé, sigo corrigiendo, agregando y quitando poemas. En realidad uno nunca termina de escribir un poema y menos un libro que fue una vida.
EL DATO“Carpa Grau” será una especie de libro long-play con treinta poemas que a su vez fueron éxitos musicales de los grupos de cumbia que marcaron historia en el Perú y Latinoamérica. Es una suerte de libro musical y autobiográfico para los iniciadores de la cumbia peruana, haciéndose un paréntesis en la vida de dos jóvenes provincianos que conocen y disfrutan este tipo de música.
viernes, 25 de abril de 2008
Eventos culturales del INC dejarán de ser gratuitos
Freddy Escudero afirma que se debe valorar a los artistas y hace llamado a la unidad de intelectuales y entes culturales de Chimbote
El responsable del área de Promoción y Desarrollo Cultural del Instituto Nacional de Cultura Filial Chimbote, Freddy Escudero, anunció que las actividades culturales que se realicen en adelante en su institución tendrán un costo pecuniario “porque es necesario valorar a los artistas e intelectuales que sacan adelante la escena cultural de Chimbote y porque el INC necesita financiar los gastos que demandan los recibos de agua, energía eléctrica, teléfono y otros servicios básicos”.
Escudero advirtió que “ya se acabaron los tiempos en que el público miraba por el encima del hombro a los artistas, precisamente porque éstos no valoraban su trabajo”. Nuestro interlocutor aclaró –sin embargo- que los dos primeros meses de puesta en práctica de esta iniciativa las actividades culturales sí tendrán ingreso libre.
Nuestro entrevistado desmintió a este blogger que el INC no esté realizando actividades culturales durante el tiempo que él tiene en la institución; sin embargo, reconoció que las mismas no habían tenido la difusión y la convocatoria del caso.
“Celebramos el Día Mundial del teatro e hicimos un conversatorio por el Aniversario de Áncash como capital de provincia”, anotó.
La unidad
El músico llamó a la unidad de todos los escritores, pintores, danzantes, artesanos, artistas en general, organizaciones de carácter lúdico, colegios y universidades locales, alrededor del INC “para impulsar proyectos de manera conjunta y porque ni siquiera el 10% de la población sabe o asiste a las actividades que realizamos de manera independiente cada organización cultural. Juntos no somos nada”, señaló.
EL DATO
Escudero se mostró hermético sobre la posibilidad de impulsar la autonomía del INC de la sede regional que funciona en Huarás y así darle el verdadero lugar que la escena cultural de Chimbote merece. “No conozco el tema, voy a estudiarlo”, sostuvo.
El responsable del área de Promoción y Desarrollo Cultural del Instituto Nacional de Cultura Filial Chimbote, Freddy Escudero, anunció que las actividades culturales que se realicen en adelante en su institución tendrán un costo pecuniario “porque es necesario valorar a los artistas e intelectuales que sacan adelante la escena cultural de Chimbote y porque el INC necesita financiar los gastos que demandan los recibos de agua, energía eléctrica, teléfono y otros servicios básicos”.
Escudero advirtió que “ya se acabaron los tiempos en que el público miraba por el encima del hombro a los artistas, precisamente porque éstos no valoraban su trabajo”. Nuestro interlocutor aclaró –sin embargo- que los dos primeros meses de puesta en práctica de esta iniciativa las actividades culturales sí tendrán ingreso libre.
Nuestro entrevistado desmintió a este blogger que el INC no esté realizando actividades culturales durante el tiempo que él tiene en la institución; sin embargo, reconoció que las mismas no habían tenido la difusión y la convocatoria del caso.
“Celebramos el Día Mundial del teatro e hicimos un conversatorio por el Aniversario de Áncash como capital de provincia”, anotó.
La unidad
El músico llamó a la unidad de todos los escritores, pintores, danzantes, artesanos, artistas en general, organizaciones de carácter lúdico, colegios y universidades locales, alrededor del INC “para impulsar proyectos de manera conjunta y porque ni siquiera el 10% de la población sabe o asiste a las actividades que realizamos de manera independiente cada organización cultural. Juntos no somos nada”, señaló.
EL DATO
Escudero se mostró hermético sobre la posibilidad de impulsar la autonomía del INC de la sede regional que funciona en Huarás y así darle el verdadero lugar que la escena cultural de Chimbote merece. “No conozco el tema, voy a estudiarlo”, sostuvo.
jueves, 24 de abril de 2008
Fiesta popular del libro
23 de Abril
En medio de un espectacular marco de público conformado por estudiantes de todos los niveles educativos, escritores, lectores en general, periodistas, docentes y amigos del trabajo educativo, la mañana de ayer en el amplio patio del Centro Cultural Centenario de Chimbote se llevó a cabo una vistosa actividad en conmemoración del “Día del Idioma Castellano” y del “Día del Libro”, la misma que consistió en un recital de poesía y música, además de la donación de cientos de libros que hicieron estudiantes de diversos colegios de la localidad a la biblioteca “César Vallejo y Centenario”.
“Esta es una verdadera fiesta del libro y la lectura, estamos felices de la acogida que se ha tenido y que sobre todo los niños estén con nosotros”, declaró el poeta Jorge Qwistgaard, presente en el evento.
Por su parte, el director de la biblioteca, Paulino Meléndez, invitó al público de la ciudad a acercarse al novísimo espacio lúdico que ofrece una serie de actividades que incluyen teatro, talleres de declamación y a presentaciones de libros cada cierto tiempo. “Esta es la casa de todos y hoy que celebramos el Día del Libro renovamos el compromiso de impulsar los recitales de poesía que se inician mañana jueves y apoyar a todos los escritores y artistas que deseen organizar actividades aquí”, manifestó nuestro interlocutor.
Una vistosa marcha de estudiantes –libro en mano- del colegio Indoamérica, portando además cientos de pancartas a favor del libro y la lectura, recorrió la avenida Alfonso Ugarte y otras arterias camino al Centro Cultural Centenario donde ayer donde realizaron un importante donativo de libros.
EL DATO
Hoy a las siete de la noche se prolongan las celebraciones por el Día del Libro, según anunciaron los organizadores. El recital en homenaje al veterano poeta Julio Orbegoso Ríos (autor de varios libros de relatos y de poesía) se desarrollará en la Biblioteca Municipal “César Vallejo y Centenario”. Mañana la cita es con el festival de teatro también en el mismo espacio. El ingreso es libre.
En medio de un espectacular marco de público conformado por estudiantes de todos los niveles educativos, escritores, lectores en general, periodistas, docentes y amigos del trabajo educativo, la mañana de ayer en el amplio patio del Centro Cultural Centenario de Chimbote se llevó a cabo una vistosa actividad en conmemoración del “Día del Idioma Castellano” y del “Día del Libro”, la misma que consistió en un recital de poesía y música, además de la donación de cientos de libros que hicieron estudiantes de diversos colegios de la localidad a la biblioteca “César Vallejo y Centenario”.
“Esta es una verdadera fiesta del libro y la lectura, estamos felices de la acogida que se ha tenido y que sobre todo los niños estén con nosotros”, declaró el poeta Jorge Qwistgaard, presente en el evento.
Por su parte, el director de la biblioteca, Paulino Meléndez, invitó al público de la ciudad a acercarse al novísimo espacio lúdico que ofrece una serie de actividades que incluyen teatro, talleres de declamación y a presentaciones de libros cada cierto tiempo. “Esta es la casa de todos y hoy que celebramos el Día del Libro renovamos el compromiso de impulsar los recitales de poesía que se inician mañana jueves y apoyar a todos los escritores y artistas que deseen organizar actividades aquí”, manifestó nuestro interlocutor.
Una vistosa marcha de estudiantes –libro en mano- del colegio Indoamérica, portando además cientos de pancartas a favor del libro y la lectura, recorrió la avenida Alfonso Ugarte y otras arterias camino al Centro Cultural Centenario donde ayer donde realizaron un importante donativo de libros.
EL DATO
Hoy a las siete de la noche se prolongan las celebraciones por el Día del Libro, según anunciaron los organizadores. El recital en homenaje al veterano poeta Julio Orbegoso Ríos (autor de varios libros de relatos y de poesía) se desarrollará en la Biblioteca Municipal “César Vallejo y Centenario”. Mañana la cita es con el festival de teatro también en el mismo espacio. El ingreso es libre.
martes, 22 de abril de 2008
Casa de Garatea se cae a pedazos
Comunas distrital y provincial tienen en absoluto abandono a monumento histórico ubicado en “La Huaca”. Pobladores se pronuncian.
La Casa de Nicolás de Garatea, ubicada en el tercer sector del centro poblado “La Huaca”, en el distrito de Santa, se encuentra totalmente abandonada y ningún gobierno municipal (ni local ni provincial) como tampoco entes como el INC se han preocupado de su mantenimiento y conservación.
LA PRIMERA ingresó ayer a este monumento que guarda escenas memorables en la vida de esta parte del país y lo que halló es simplemente escombros al interior lo que fuera la sede de una de las haciendas más prósperas del valle y domicilio del filántropo que ocupara importantes cargos en la vida pública de la provincia.
Paredes agrietadas, salitradas y parchadas de manera artesanal, ventanas oxidadas y sin vidrios, techos apuntalados con maderos para evitar que el segundo nivel se desplome y parte de los pisos y escaleras de madera en pésimo estado de conservación. Pero lo más lamentable lo manifestaron los pobladores:
“Hace unos años la comuna le cedió el espacio al Vaso de Leche y la señora encargada de preparar los alimentos lo hacía con enormes fogones a leña y al interior del monumento. Encima esta persona ahora se niega a entregar las llaves de la casona. Esto debe ser solucionado, que se le dé a la Casa de Garatea el lugar que merece”, señalaron.
Nicolás de Garatea, vecino ilustre del valle, llegó a Tambo Real en 1910 donde trabajó como mayordomo de campo, fue director desde su fundación de la Corporación Peruana del Santa, presidente de la Junta Especial Pro Desocupados de Chimbote (que construyó las primeras escuelas de varones y mujeres, además de la iglesia parroquial) y fu alcalde de Chimbote entre 1934 y 1935.
EL DATO
La alcaldesa provincial Victoria Espinosa constató los daños y el estado ruinoso del monumento y se comprometió ayer a gestionar su remodelación y conservación. “Debemos refaccionar este foco de atención turística. La Huaca se puede convertir en lugar obligado de visita y esto generaría ingresos para los lugareños debido a la presencia de turistas. Vamos a ver qué hacemos por la casona”, sostuvo.
La Casa de Nicolás de Garatea, ubicada en el tercer sector del centro poblado “La Huaca”, en el distrito de Santa, se encuentra totalmente abandonada y ningún gobierno municipal (ni local ni provincial) como tampoco entes como el INC se han preocupado de su mantenimiento y conservación.
LA PRIMERA ingresó ayer a este monumento que guarda escenas memorables en la vida de esta parte del país y lo que halló es simplemente escombros al interior lo que fuera la sede de una de las haciendas más prósperas del valle y domicilio del filántropo que ocupara importantes cargos en la vida pública de la provincia.
Paredes agrietadas, salitradas y parchadas de manera artesanal, ventanas oxidadas y sin vidrios, techos apuntalados con maderos para evitar que el segundo nivel se desplome y parte de los pisos y escaleras de madera en pésimo estado de conservación. Pero lo más lamentable lo manifestaron los pobladores:
“Hace unos años la comuna le cedió el espacio al Vaso de Leche y la señora encargada de preparar los alimentos lo hacía con enormes fogones a leña y al interior del monumento. Encima esta persona ahora se niega a entregar las llaves de la casona. Esto debe ser solucionado, que se le dé a la Casa de Garatea el lugar que merece”, señalaron.
Nicolás de Garatea, vecino ilustre del valle, llegó a Tambo Real en 1910 donde trabajó como mayordomo de campo, fue director desde su fundación de la Corporación Peruana del Santa, presidente de la Junta Especial Pro Desocupados de Chimbote (que construyó las primeras escuelas de varones y mujeres, además de la iglesia parroquial) y fu alcalde de Chimbote entre 1934 y 1935.
EL DATO
La alcaldesa provincial Victoria Espinosa constató los daños y el estado ruinoso del monumento y se comprometió ayer a gestionar su remodelación y conservación. “Debemos refaccionar este foco de atención turística. La Huaca se puede convertir en lugar obligado de visita y esto generaría ingresos para los lugareños debido a la presencia de turistas. Vamos a ver qué hacemos por la casona”, sostuvo.
domingo, 20 de abril de 2008
Periodismo y literatura: tan lejos, tan cerca
Universidad San Pedro organiza Curso-Taller
Entregar al participante las herramientas narrativas para utilizarlas en la redacción periodística, analizar el fenómeno del periodismo literario -en especial la crónica- y aprender a reconocer a cada ser humano que hay detrás de cada acontecimiento para luego retratárselo a los lectores a través de la palabra escrita es el objetivo del curso-taller que empezará a dictarse a partir del próximo 26 de abril en la Universidad San Pedro.
El curso-taller está dirigido a periodistas, estudiantes de comunicación social, docentes y público en general. Las diez sesiones se desarrollarán a lo largo de tres semanas consecutivas los fines de semana. Las inscripciones están abiertas en la ciudad universitaria de la UPS en Los Pinos, en la Oficina Central de Extensión Universitaria y Proyección Social.
Entregar al participante las herramientas narrativas para utilizarlas en la redacción periodística, analizar el fenómeno del periodismo literario -en especial la crónica- y aprender a reconocer a cada ser humano que hay detrás de cada acontecimiento para luego retratárselo a los lectores a través de la palabra escrita es el objetivo del curso-taller que empezará a dictarse a partir del próximo 26 de abril en la Universidad San Pedro.
El curso-taller está dirigido a periodistas, estudiantes de comunicación social, docentes y público en general. Las diez sesiones se desarrollarán a lo largo de tres semanas consecutivas los fines de semana. Las inscripciones están abiertas en la ciudad universitaria de la UPS en Los Pinos, en la Oficina Central de Extensión Universitaria y Proyección Social.
Hidrandina Sur y la imaginación escolar
Convocan a Concurso de Cuento "Achkiy"
La empresa de energía Hidrandina S.A, convocó recientemente al I Concurso Escolar y Regional de Cuento “Achkiy” con la finalidad de incentivar la vocación literaria entre los jóvenes en edad escolar de nuestra jurisdicción.
El gerente general de la citada empresa, organizadora del evento, Milton Guerrero, destacó el nivel que ha alcanzado la narrativa ancashina en el espectro nacional e hizo votos para la aparición de nuevos valores en el mundo de la escritura. “Hemos convocado a un jurado con destacados escritores de Ancash y cuyo fallo será inapelable. Esperamos que los docentes incentiven a sus alumnos en el arte de la literatura”, declaró nuestro entrevistado.
Las bases para el concurso están disponibles en la citada empresa. El plazo de entrega de trabajos vence el 31 de julio.
La empresa de energía Hidrandina S.A, convocó recientemente al I Concurso Escolar y Regional de Cuento “Achkiy” con la finalidad de incentivar la vocación literaria entre los jóvenes en edad escolar de nuestra jurisdicción.
El gerente general de la citada empresa, organizadora del evento, Milton Guerrero, destacó el nivel que ha alcanzado la narrativa ancashina en el espectro nacional e hizo votos para la aparición de nuevos valores en el mundo de la escritura. “Hemos convocado a un jurado con destacados escritores de Ancash y cuyo fallo será inapelable. Esperamos que los docentes incentiven a sus alumnos en el arte de la literatura”, declaró nuestro entrevistado.
Las bases para el concurso están disponibles en la citada empresa. El plazo de entrega de trabajos vence el 31 de julio.
sábado, 19 de abril de 2008
Reportaje: Mayo del 68 - Testimonio *
Instantáneas en sepia de un mes excepcional
Juan Goytisolo
Francia se aburre". La frase, formulada en vísperas del mítico Mayo Francés, adquirió celebridad posterior por su índole involuntariamente adivina. Su autor tenía razón. Los jóvenes y menos jóvenes nos aburríamos y, tal vez por eso, Monique Lange y yo nos fuimos a pasar unas vacaciones en el Midi. Apenas habíamos tenido tiempo de tomar el sol y de bañarnos, cuando escuchamos por la radio las primeras noticias de la rebelión estudiantil: manifestaciones callejeras, choques con las Compañías Republicanas de Seguridad, ocupación de La Sorbona y Censier, barricadas. Las imágenes reproducidas por la televisión y la lectura de la prensa nos decidieron a regresar. No queríamos perdernos lo que respondía a nuestros sueños y colmaba nuestras aspiraciones. La conjunción de Marx y Rimbaud parecía concretarse al fin. La política tradicional se abría a nuevos ámbitos: los de los deseos reprimidos, la utopía y la imaginación, de la invención y exigencia de nuevas y más amplias libertades.
Desde nuestro regreso a París, nos pusimos en contacto con Jean Genet. Los acontecimientos le habían devuelto toda su combatividad y energía. Le acompañamos a La Sorbona liberada por los estudiantes y su intervención mordaz en una asamblea improvisada arrancó un aplauso cerrado de los asistentes. Un tanto abrumado e inquieto por el éxito de sus palabras -estaba habituado, me dijo, a los silbidos e insultos-, propuso que fuéramos a Billancourt. Contrastando con la agitación del Quartier Latin, comprobamos que reinaba la calma en las fábricas. Pues, mientras Mendès-France apoyaba el movimiento de los jóvenes, el PC se mantenía en unas posiciones que juzgábamos reformistas y limitaba sus reivindicaciones al ámbito laboral.
El domicilio de Monique en la Rue Poissionière, contiguo al cine Rex y a un centenar de metros de L'Humanité, es el punto neurálgico de manifestaciones opuestas: la de los estudiantes y grupos libertarios que silban y vocean consignas contra el órgano oficial del Partido Comunista, y la de los representantes de la derecha pura y dura, movilizados contra "la marea roja". Los unos gritan "De Gaulle, dimisión" y repudian la línea timorata y acomodaticia del partido. Los otros agitan banderas tricolores y denuncian la mano de Moscú. Un día, la cohorte patriótica, rechazada por una carga policial, se reagrupa al pie de nuestro inmueble. Como escribí en el capítulo titulado 'El territorio del poeta', en En los reinos de Taifa, Genet -estábamos almorzando- agarra la sopera y trata de arrojarla por la ventana a los manifestantes. Monique se la arrebata de las manos: ¡es de la vecina! Él coge entonces un plato, que va a estrellarse contra la boina, el cráneo, de un individuo de una cincuentena de años que parece un miembro de L'Action Française inventado por Buñuel. La frente le sangra ligeramente mientras mira hacia arriba al genio encolerizado que le insulta. "Grossier personnage!", se limita a decir. La portera ha tenido la precaución de cerrar la entrada del edificio y los manifestantes se olvidan del increpador.
Entre tanto las noticias eufóricas se multiplican: la "liberación" del Gran Teatro del Odéon, convertido en un foro de discusión abierto a todas las corrientes de la izquierda; la del Colegio de España en la Ciudad Universitaria, en la que participó, según creo, Fernando Arrabal. Con Genet y un grupo de amigos, proponemos la del Palais de l'Institut del Quai de Conti. Nuestro razonamiento es el siguiente: los pilares del Estado burgués son el Ministerio del Interior, el Banco de Francia y la Academia Francesa. Ante la imposibilidad de liberar/ocupar los dos primeros, fuertemente protegidos por la policía, nos queda la tercera opción: irrumpir en aquélla, reunir en sus salones a todos los mendigos y borrachos del barrio, revestirlos solemnemente con el uniforme de los inmortales y desacralizar para siempre a la gloriosa institución. Pero nuestro poder de convocatoria es mínimo y los obstáculos se acumulan. El Quartier Latin es escenario de enfrentamientos cada vez más duros, la consigna es ir a las barricadas. Se habla de decenas de heridos (los hubo) e incluso de muertos (algo desmentido luego), lo que no obsta para que la multitud marche al grito de "¡De Gaulle, asesino!".
Mientras las manifestaciones se suceden en los bulevares, un amigo del editor Frédéric Ditis nos informa de la ocupación del vecino Conservatorio de Música. Monique y yo acudimos allí para encontrarnos con una miniasamblea de gasolinas -el primer movimiento de liberación homosexual europeo, anterior a la identidad gay neoyorquina- que, un par de días después, desfilará por el bulevar de Belleville con atuendos provocativos, al grito de "nous sommes tous des enculés", entre su regocijo y los aplausos de la población inmigrante.
París es una fiesta muy distinta de la que celebró Hemingway. Los enfrentamientos con las fuerzas del orden se suceden noche tras noche y todos, menos los atemorizados burgueses, nos sentimos vagamente conspiradores. Recuerdo una reunión con el núcleo de escritores de la Rue Saint-Benoîs: Marguerite Duras, Mascolo, Blanchot, Edgar Morin, Robert Antelme. Se habló de crear nuevos espacios de desalienación: libertad sexual, crítica del consumismo y de la consideración de la industria como máximo agente de la liberación del ser humano, busca de alternativas de trabajo creativo y no enajenado; de actuar desde la periferia del sistema, como una fuerza centrífuga, a fin de poner en tela de juicio los consabidos criterios de normatividad. En corto, de desvelar, a partir de la propia experiencia individual, los mecanismos de opresión de los demás y de forjar así una estrategia global común a todos los marginados por razones de sexo, raza, clase social, nacionalidad, religión, lengua, cultura, etcétera. Nos embriagamos de palabras, la mejor y más bella forma de embriaguez.
Pero el movimiento contestatario pierde fuerza y aliento, la exaltación cede paulatinamente paso a un cansancio general que propicia la negociación entre el poder y los partidos de izquierda y los sindicatos. Recupero algunas imágenes dispersas, pero indicativas del descenso de nivel de las aguas: la behetría y el desmadre creados por la liberación del Colegio de España, cuya dirección, ofrecida en una posterior llamada telefónica, tuve el buen criterio de rehusar; la cola de inmigrantes españoles a la puerta de una entidad bancaria de la avenida de la Ópera que corrían a retirar sus ahorros ante el rumor de la inminente devaluación de la moneda francesa; la expresión ceñuda de un compatriota, peluquero de mi barrio, en respuesta a los insultos al general De Gaulle: "¡No sería nuestro Franco quien se dejaría insultar así!". El más negro pesimismo me invade: ¿tenía cura la fatal Península? Me identifico ya, sin saberlo, con el mítico conde don Julián y el Juan Sin Tierra de mi admirado Blanco White.
Firmados los acuerdos sindicales con el Gobierno y restablecidos el orden y la distribución de combustible para los automóviles, la población parisiense, en plena resaca de aquellas dos semanas inolvidables, partió masivamente a respirar el aire del campo. Como decía un locutor de voz optimista y tranquilizadora, "después de estos días de agitación y de ansiedad, c'est la détente!". Unas horas más tarde, un comunicado de la Dirección General de Tráfico anunciaba la cifra provisional de una veintena de muertos en las carreteras. ¡Una estadística insignificante en medio de la dicha general creada por el retorno a la normalidad!
* Tomado de Babelia, suplemento cultural de El País.
Juan Goytisolo
Francia se aburre". La frase, formulada en vísperas del mítico Mayo Francés, adquirió celebridad posterior por su índole involuntariamente adivina. Su autor tenía razón. Los jóvenes y menos jóvenes nos aburríamos y, tal vez por eso, Monique Lange y yo nos fuimos a pasar unas vacaciones en el Midi. Apenas habíamos tenido tiempo de tomar el sol y de bañarnos, cuando escuchamos por la radio las primeras noticias de la rebelión estudiantil: manifestaciones callejeras, choques con las Compañías Republicanas de Seguridad, ocupación de La Sorbona y Censier, barricadas. Las imágenes reproducidas por la televisión y la lectura de la prensa nos decidieron a regresar. No queríamos perdernos lo que respondía a nuestros sueños y colmaba nuestras aspiraciones. La conjunción de Marx y Rimbaud parecía concretarse al fin. La política tradicional se abría a nuevos ámbitos: los de los deseos reprimidos, la utopía y la imaginación, de la invención y exigencia de nuevas y más amplias libertades.
Desde nuestro regreso a París, nos pusimos en contacto con Jean Genet. Los acontecimientos le habían devuelto toda su combatividad y energía. Le acompañamos a La Sorbona liberada por los estudiantes y su intervención mordaz en una asamblea improvisada arrancó un aplauso cerrado de los asistentes. Un tanto abrumado e inquieto por el éxito de sus palabras -estaba habituado, me dijo, a los silbidos e insultos-, propuso que fuéramos a Billancourt. Contrastando con la agitación del Quartier Latin, comprobamos que reinaba la calma en las fábricas. Pues, mientras Mendès-France apoyaba el movimiento de los jóvenes, el PC se mantenía en unas posiciones que juzgábamos reformistas y limitaba sus reivindicaciones al ámbito laboral.
El domicilio de Monique en la Rue Poissionière, contiguo al cine Rex y a un centenar de metros de L'Humanité, es el punto neurálgico de manifestaciones opuestas: la de los estudiantes y grupos libertarios que silban y vocean consignas contra el órgano oficial del Partido Comunista, y la de los representantes de la derecha pura y dura, movilizados contra "la marea roja". Los unos gritan "De Gaulle, dimisión" y repudian la línea timorata y acomodaticia del partido. Los otros agitan banderas tricolores y denuncian la mano de Moscú. Un día, la cohorte patriótica, rechazada por una carga policial, se reagrupa al pie de nuestro inmueble. Como escribí en el capítulo titulado 'El territorio del poeta', en En los reinos de Taifa, Genet -estábamos almorzando- agarra la sopera y trata de arrojarla por la ventana a los manifestantes. Monique se la arrebata de las manos: ¡es de la vecina! Él coge entonces un plato, que va a estrellarse contra la boina, el cráneo, de un individuo de una cincuentena de años que parece un miembro de L'Action Française inventado por Buñuel. La frente le sangra ligeramente mientras mira hacia arriba al genio encolerizado que le insulta. "Grossier personnage!", se limita a decir. La portera ha tenido la precaución de cerrar la entrada del edificio y los manifestantes se olvidan del increpador.
Entre tanto las noticias eufóricas se multiplican: la "liberación" del Gran Teatro del Odéon, convertido en un foro de discusión abierto a todas las corrientes de la izquierda; la del Colegio de España en la Ciudad Universitaria, en la que participó, según creo, Fernando Arrabal. Con Genet y un grupo de amigos, proponemos la del Palais de l'Institut del Quai de Conti. Nuestro razonamiento es el siguiente: los pilares del Estado burgués son el Ministerio del Interior, el Banco de Francia y la Academia Francesa. Ante la imposibilidad de liberar/ocupar los dos primeros, fuertemente protegidos por la policía, nos queda la tercera opción: irrumpir en aquélla, reunir en sus salones a todos los mendigos y borrachos del barrio, revestirlos solemnemente con el uniforme de los inmortales y desacralizar para siempre a la gloriosa institución. Pero nuestro poder de convocatoria es mínimo y los obstáculos se acumulan. El Quartier Latin es escenario de enfrentamientos cada vez más duros, la consigna es ir a las barricadas. Se habla de decenas de heridos (los hubo) e incluso de muertos (algo desmentido luego), lo que no obsta para que la multitud marche al grito de "¡De Gaulle, asesino!".
Mientras las manifestaciones se suceden en los bulevares, un amigo del editor Frédéric Ditis nos informa de la ocupación del vecino Conservatorio de Música. Monique y yo acudimos allí para encontrarnos con una miniasamblea de gasolinas -el primer movimiento de liberación homosexual europeo, anterior a la identidad gay neoyorquina- que, un par de días después, desfilará por el bulevar de Belleville con atuendos provocativos, al grito de "nous sommes tous des enculés", entre su regocijo y los aplausos de la población inmigrante.
París es una fiesta muy distinta de la que celebró Hemingway. Los enfrentamientos con las fuerzas del orden se suceden noche tras noche y todos, menos los atemorizados burgueses, nos sentimos vagamente conspiradores. Recuerdo una reunión con el núcleo de escritores de la Rue Saint-Benoîs: Marguerite Duras, Mascolo, Blanchot, Edgar Morin, Robert Antelme. Se habló de crear nuevos espacios de desalienación: libertad sexual, crítica del consumismo y de la consideración de la industria como máximo agente de la liberación del ser humano, busca de alternativas de trabajo creativo y no enajenado; de actuar desde la periferia del sistema, como una fuerza centrífuga, a fin de poner en tela de juicio los consabidos criterios de normatividad. En corto, de desvelar, a partir de la propia experiencia individual, los mecanismos de opresión de los demás y de forjar así una estrategia global común a todos los marginados por razones de sexo, raza, clase social, nacionalidad, religión, lengua, cultura, etcétera. Nos embriagamos de palabras, la mejor y más bella forma de embriaguez.
Pero el movimiento contestatario pierde fuerza y aliento, la exaltación cede paulatinamente paso a un cansancio general que propicia la negociación entre el poder y los partidos de izquierda y los sindicatos. Recupero algunas imágenes dispersas, pero indicativas del descenso de nivel de las aguas: la behetría y el desmadre creados por la liberación del Colegio de España, cuya dirección, ofrecida en una posterior llamada telefónica, tuve el buen criterio de rehusar; la cola de inmigrantes españoles a la puerta de una entidad bancaria de la avenida de la Ópera que corrían a retirar sus ahorros ante el rumor de la inminente devaluación de la moneda francesa; la expresión ceñuda de un compatriota, peluquero de mi barrio, en respuesta a los insultos al general De Gaulle: "¡No sería nuestro Franco quien se dejaría insultar así!". El más negro pesimismo me invade: ¿tenía cura la fatal Península? Me identifico ya, sin saberlo, con el mítico conde don Julián y el Juan Sin Tierra de mi admirado Blanco White.
Firmados los acuerdos sindicales con el Gobierno y restablecidos el orden y la distribución de combustible para los automóviles, la población parisiense, en plena resaca de aquellas dos semanas inolvidables, partió masivamente a respirar el aire del campo. Como decía un locutor de voz optimista y tranquilizadora, "después de estos días de agitación y de ansiedad, c'est la détente!". Unas horas más tarde, un comunicado de la Dirección General de Tráfico anunciaba la cifra provisional de una veintena de muertos en las carreteras. ¡Una estadística insignificante en medio de la dicha general creada por el retorno a la normalidad!
* Tomado de Babelia, suplemento cultural de El País.
La plástica y el ejercicio de la libertad
Breve entrevista con el polifacético Teófilo Villacorta: pintor, escritor y apasionado docente de artes plásticas en su natal Huarmey
Augusto Rubio Acosta
¿Por qué pintar Kawide, por qué dedicarse al arte?
Pintar es una manera de vivir inyectado de ese extraño sentimiento que le da sentido a las cosas, una manera de comunicarse a través de los colores y con la absoluta libertad que hace que mi vida sea mas persistente. Pinto además, porque en el momento de crear mis extrañas pero sinceras formas, siento que he creado una vida y he matado una muerte, de las muchas que nos rondan y que tienen boca, ojos y oído.
¿En qué escuela pictórica te inscribes como artista plástico y por qué?
Nunca me he preocupado por instalarme en alguna corriente o escuela pictórica, mis obras son una especie de experimentación constante. Creo que la verdadera expresión plástica es esa inquietud inquebrantable de explorar muchos mundos.
¿Qué piensas de la actual situación de las Escuelas de Bellas Artes en el país?
Que están pasando por momentos críticos que han hecho que los alumnos y algunos docentes conscientes tomen medidas directas para poder devolverle el prestigio de décadas pasadas, Hace poco vimos la toma de la escuela en Lima y la destitución del inefable Leslie Lee entornillado en el cargo, lo que generó una corrupción que alcanzó hasta los niveles académicos distorsionando los lineamientos de la enseñanza artística. En provincias suceden casos similares
Sabemos que pronto harás una exposición individual en Chimbote. ¿Cuántos cuadros serán, cuál será la temática?
Si, será en el Centro Cultural Centenario; una muestra en homenaje al ilustre escritor ancashino Julio Ortega. La exposición es antológica, sin llegar a ser una retrospectiva; cuadros de diversas etapas, estilos e incluso técnicas.
¿Cómo ves la realidad pictórica de Ancash en relación a otras regiones?
Ancash se ha caracterizado siempre por tener prestigiosos artistas, algunos residentes en el extranjero son dignos representantes de la pintura latinoamericana y mundial. También tenemos jóvenes valores emergentes con un gran futuro. Ancash tiene un lugar expectante en la plástica peruana.
Dale aliento o desengaña de una vez al joven que desea empezar a pintar.
Mi maestro de pintura nos dijo el primer día de clases: "La pintura es una profesión de los que tienen huevos".
El DATO
Teófilo Villacorta “Kawide” también se dedica a la escritura y ha publicado libros los de relatos “Aventuras en marea caliente” y “De color rojo”, además de los poemarios “Flores en mi celda” y “Nostalgia desde los escombros”. Actualmente se dedica a la docencia en una institución educativa de la ciudad que lo vio nacer, mientras da rienda suelta a su imaginación en su taller de la calle Casma.
Augusto Rubio Acosta
¿Por qué pintar Kawide, por qué dedicarse al arte?
Pintar es una manera de vivir inyectado de ese extraño sentimiento que le da sentido a las cosas, una manera de comunicarse a través de los colores y con la absoluta libertad que hace que mi vida sea mas persistente. Pinto además, porque en el momento de crear mis extrañas pero sinceras formas, siento que he creado una vida y he matado una muerte, de las muchas que nos rondan y que tienen boca, ojos y oído.
¿En qué escuela pictórica te inscribes como artista plástico y por qué?
Nunca me he preocupado por instalarme en alguna corriente o escuela pictórica, mis obras son una especie de experimentación constante. Creo que la verdadera expresión plástica es esa inquietud inquebrantable de explorar muchos mundos.
¿Qué piensas de la actual situación de las Escuelas de Bellas Artes en el país?
Que están pasando por momentos críticos que han hecho que los alumnos y algunos docentes conscientes tomen medidas directas para poder devolverle el prestigio de décadas pasadas, Hace poco vimos la toma de la escuela en Lima y la destitución del inefable Leslie Lee entornillado en el cargo, lo que generó una corrupción que alcanzó hasta los niveles académicos distorsionando los lineamientos de la enseñanza artística. En provincias suceden casos similares
Sabemos que pronto harás una exposición individual en Chimbote. ¿Cuántos cuadros serán, cuál será la temática?
Si, será en el Centro Cultural Centenario; una muestra en homenaje al ilustre escritor ancashino Julio Ortega. La exposición es antológica, sin llegar a ser una retrospectiva; cuadros de diversas etapas, estilos e incluso técnicas.
¿Cómo ves la realidad pictórica de Ancash en relación a otras regiones?
Ancash se ha caracterizado siempre por tener prestigiosos artistas, algunos residentes en el extranjero son dignos representantes de la pintura latinoamericana y mundial. También tenemos jóvenes valores emergentes con un gran futuro. Ancash tiene un lugar expectante en la plástica peruana.
Dale aliento o desengaña de una vez al joven que desea empezar a pintar.
Mi maestro de pintura nos dijo el primer día de clases: "La pintura es una profesión de los que tienen huevos".
El DATO
Teófilo Villacorta “Kawide” también se dedica a la escritura y ha publicado libros los de relatos “Aventuras en marea caliente” y “De color rojo”, además de los poemarios “Flores en mi celda” y “Nostalgia desde los escombros”. Actualmente se dedica a la docencia en una institución educativa de la ciudad que lo vio nacer, mientras da rienda suelta a su imaginación en su taller de la calle Casma.
jueves, 17 de abril de 2008
¿Quién conoce a Melissa?
Carlos Rengifo
Bastó un e-mail del novio de la chica para que la mecha se encendiera, y brotara como una espina, y se expandiera por la red como una vociferación de protesta, llenando los corazones primero de sorpresa, luego de incredulidad, finalmente de indignación. El azar la había llevado a Ecuador, en una visita sustituta que la hizo partícipe de una reunión abierta, televisada, y sin embargo los hilos de la prepotencia oficial la iban a cercar como una araña arrincona a una mosca. Tal vez la inocencia le jugó una mala pasada, quizás la buena voluntad le mostró su otra cara; no obstante, no era para que se ensañara tanto con ella. ¿Estaba acaso ya predestinada? ¿Todo la llevaba irremediablemente hacia las garras bufalonescas? Sea como fuere, lo cierto es que ella se encontró de pronto en el lugar equivocado, en el momento equivocado, y la pala temeraria —y ciega— de la militancia la arrastró con toda la carga, la levantó en vilo y la hundió en el pozo frío de la represión.
Voces ajenas se levantaron como si de su hermana se tratara, y helos aquí cerrando el puño y escupiendo a destajo la mala estrella que le tocó vivir a la estudiante universitaria, asidua concurrente de tertulias y recitales literarios. De golpe, cual ventarrón intempestivo, medio mundo se sintió tocado por la suerte de la joven, seguían la pista de su destino y urdían plantones frente a edificios públicos para su inmediata liberación. El agua, que tanta falta hace a los pobres de asentamientos humanos y a los que habitan en la cima de los cerros, fue derrochada por un rochabús una tarde de perfomance en la que lo que menos deseaban los manifestantes era bañarse. Y los apaleos, empujones, botas en ristre, le dieron a esa tarde la razón para seguir odiando a la tombería y continuar con la rabia.
Abogados, parientes, salieron en defensa de la equivocación, y mientras se esperaban pruebas, pruebas al canto, a la vez que registraban la vivienda de la infortunada joven, el mandamás de los captores justificaba su error. Salía con su mejor perfil en la tele, rodeado de micrófonos, en tanto los flashbacks televisivos mostraban a la muchacha esposada en Aguas Verdes, metida en un automóvil, entrando en una dependencia policial. Youtube lo hubiera tenido entre sus videos más vistos si no fuera porque Amy Winehouse acaparaba la atención entonces; pero lo que sí se vio fue al infatigable maestro Delfín participando en la manifestación, enhiesto como sus esculturas de hierro.
El hecho cruzó fronteras mentales, abrió los ojos de muchos, intelectuales insospechados daban su nombre y DNI a una carta dirigida al presidente, y hasta los borrachitos de Quilca dejaron a un lado sus botellas y se unieron al reclamo, que les salió por la culata porque la bufalonada vestida de Rambo les agrió las cervezas encimándolos y amenazándolos cual si fueran terroristas, cuando el único atentado que podrían cometer era solo contra sus hígados. La rabia creció, mientras la situación de la chica no cambiaba, y se incrementó aún más cuando la trasladaron a Santa Mónica y le implantaron un régimen estricto.
Sola, en la frialdad de cuatro paredes, ahora ella medita, siente, sus ojos se cierran al sonido de los ecos distantes, a la reminiscencia de la libertad perdida. Con apenas cuatro horas de camino en el patio, visitas restringidas y sombra por doquier, su cautiverio en el tercer piso del pabellón C es más duro, más indigno. Para consolarse, quizás, para paliar ese sentimiento contrariado de ira, impotencia y desazón, la joven escribe, se ensimisma, procura trasladar en palabras lo que su voz no puede traducir, y el dolor del encierro la alienta, la desgarra, la hace madurar, en medio de una situación que nunca imaginó, que jamás en su vida se le cruzó por la mente. Ella, que tampoco se imaginó, ni siquiera en sus remotos sueños, que iba a ser lo que ahora es: un símbolo, parte de un sentimiento de privación injusta a la libertad. Y que ahora también, de un modo visceral, en la clausura severa que la induce a replegarse para resistir, en el encuentro obligado consigo misma, maniatada tal vez por su propia indefensión y tristeza, esta joven recluida, deshogándose, se está convirtiendo en poeta.
* Tomado de el escritorzuelo / www.carlosrengifo.blogsome.com
Bastó un e-mail del novio de la chica para que la mecha se encendiera, y brotara como una espina, y se expandiera por la red como una vociferación de protesta, llenando los corazones primero de sorpresa, luego de incredulidad, finalmente de indignación. El azar la había llevado a Ecuador, en una visita sustituta que la hizo partícipe de una reunión abierta, televisada, y sin embargo los hilos de la prepotencia oficial la iban a cercar como una araña arrincona a una mosca. Tal vez la inocencia le jugó una mala pasada, quizás la buena voluntad le mostró su otra cara; no obstante, no era para que se ensañara tanto con ella. ¿Estaba acaso ya predestinada? ¿Todo la llevaba irremediablemente hacia las garras bufalonescas? Sea como fuere, lo cierto es que ella se encontró de pronto en el lugar equivocado, en el momento equivocado, y la pala temeraria —y ciega— de la militancia la arrastró con toda la carga, la levantó en vilo y la hundió en el pozo frío de la represión.
Voces ajenas se levantaron como si de su hermana se tratara, y helos aquí cerrando el puño y escupiendo a destajo la mala estrella que le tocó vivir a la estudiante universitaria, asidua concurrente de tertulias y recitales literarios. De golpe, cual ventarrón intempestivo, medio mundo se sintió tocado por la suerte de la joven, seguían la pista de su destino y urdían plantones frente a edificios públicos para su inmediata liberación. El agua, que tanta falta hace a los pobres de asentamientos humanos y a los que habitan en la cima de los cerros, fue derrochada por un rochabús una tarde de perfomance en la que lo que menos deseaban los manifestantes era bañarse. Y los apaleos, empujones, botas en ristre, le dieron a esa tarde la razón para seguir odiando a la tombería y continuar con la rabia.
Abogados, parientes, salieron en defensa de la equivocación, y mientras se esperaban pruebas, pruebas al canto, a la vez que registraban la vivienda de la infortunada joven, el mandamás de los captores justificaba su error. Salía con su mejor perfil en la tele, rodeado de micrófonos, en tanto los flashbacks televisivos mostraban a la muchacha esposada en Aguas Verdes, metida en un automóvil, entrando en una dependencia policial. Youtube lo hubiera tenido entre sus videos más vistos si no fuera porque Amy Winehouse acaparaba la atención entonces; pero lo que sí se vio fue al infatigable maestro Delfín participando en la manifestación, enhiesto como sus esculturas de hierro.
El hecho cruzó fronteras mentales, abrió los ojos de muchos, intelectuales insospechados daban su nombre y DNI a una carta dirigida al presidente, y hasta los borrachitos de Quilca dejaron a un lado sus botellas y se unieron al reclamo, que les salió por la culata porque la bufalonada vestida de Rambo les agrió las cervezas encimándolos y amenazándolos cual si fueran terroristas, cuando el único atentado que podrían cometer era solo contra sus hígados. La rabia creció, mientras la situación de la chica no cambiaba, y se incrementó aún más cuando la trasladaron a Santa Mónica y le implantaron un régimen estricto.
Sola, en la frialdad de cuatro paredes, ahora ella medita, siente, sus ojos se cierran al sonido de los ecos distantes, a la reminiscencia de la libertad perdida. Con apenas cuatro horas de camino en el patio, visitas restringidas y sombra por doquier, su cautiverio en el tercer piso del pabellón C es más duro, más indigno. Para consolarse, quizás, para paliar ese sentimiento contrariado de ira, impotencia y desazón, la joven escribe, se ensimisma, procura trasladar en palabras lo que su voz no puede traducir, y el dolor del encierro la alienta, la desgarra, la hace madurar, en medio de una situación que nunca imaginó, que jamás en su vida se le cruzó por la mente. Ella, que tampoco se imaginó, ni siquiera en sus remotos sueños, que iba a ser lo que ahora es: un símbolo, parte de un sentimiento de privación injusta a la libertad. Y que ahora también, de un modo visceral, en la clausura severa que la induce a replegarse para resistir, en el encuentro obligado consigo misma, maniatada tal vez por su propia indefensión y tristeza, esta joven recluida, deshogándose, se está convirtiendo en poeta.
* Tomado de el escritorzuelo / www.carlosrengifo.blogsome.com
Ciclo de Cine Ruso en Huarmey
Embajada y comuna juntos por la cultura
Por primera vez en Huarmey se aperturó el pasado lunes un ciclo de cine que permite al público interesado (estudiantes de nivel escolar, universitarios e intelectuales) ampliar gratuitamente sus horizontes culturales y sociales. Se trata del Ciclo de Cine Ruso que sacan adelante hasta el viernes próximo la comuna provincial y la Federación de Rusia, representada por el alcalde Pedro Tapia Marcelo y Mijail Troyansky, respectivamente.
“Nuestra prioridad siempre va a ser dedicar los esfuerzos posibles al campo cultural y qué mejor que hacerlo con films de nivel que nos ayudan a entender la realidad social y cultural de Rusia. Agradecemos el apoyo de la embajada y en breve estaremos ampliando estos ciclos de cine a otros espacios”, declaró ayer citado el antes citado burgomaestre huarmeyano.
Por primera vez en Huarmey se aperturó el pasado lunes un ciclo de cine que permite al público interesado (estudiantes de nivel escolar, universitarios e intelectuales) ampliar gratuitamente sus horizontes culturales y sociales. Se trata del Ciclo de Cine Ruso que sacan adelante hasta el viernes próximo la comuna provincial y la Federación de Rusia, representada por el alcalde Pedro Tapia Marcelo y Mijail Troyansky, respectivamente.
“Nuestra prioridad siempre va a ser dedicar los esfuerzos posibles al campo cultural y qué mejor que hacerlo con films de nivel que nos ayudan a entender la realidad social y cultural de Rusia. Agradecemos el apoyo de la embajada y en breve estaremos ampliando estos ciclos de cine a otros espacios”, declaró ayer citado el antes citado burgomaestre huarmeyano.
Día del Libro en la Biblioteca Municipal
El 23 de abril próximo, la Biblioteca Municipal “César Vallejo y Centenario” celebrará el Día del Idioma y el Día del Libro con una donación significativa de libros de diversos centros educativos –resaltando el aporte del Colegio Indoamérica- que se acordaron de incrementar el acervo bibliográfico de ese espacio cultural.
En efecto, a las 10 de la mañana del miércoles próximo en el amplio patio de la biblioteca edil se efectuará la citada donación, así como una exposición de libros de autores dedicados a la literatura infantil y juvenil.
“El jueves 24 vamos a realizar el recital y homenaje al poeta Julio Orbegoso y el 25 se habrá teatro infantil más la inauguración de la Muestra Nacional de Pintura”, declararon los organizadores, quienes invitaron al público a estos eventos gratuitos.
En efecto, a las 10 de la mañana del miércoles próximo en el amplio patio de la biblioteca edil se efectuará la citada donación, así como una exposición de libros de autores dedicados a la literatura infantil y juvenil.
“El jueves 24 vamos a realizar el recital y homenaje al poeta Julio Orbegoso y el 25 se habrá teatro infantil más la inauguración de la Muestra Nacional de Pintura”, declararon los organizadores, quienes invitaron al público a estos eventos gratuitos.
miércoles, 16 de abril de 2008
Vallejo: presencia inmortal
Biblioteca Municipal y Centro Cultural Centenario rinden homenaje al poeta de todos
Un nutrido auditorio acompañó el martes pasado el recital de homenaje en conmemoración de los 70 años de la desaparición física del vate peruano y universal César Vallejo, realizado en el Centro Cultural Centenario. Los declamadores que protagonizaron el acto cultural fueron los reconocidos Jorge Álvarez Bocanegra y Róger Velásquez Torres, quienes se llevaron el aplauso de los asistentes.
“Masa”, “Trilce”, “La cena miserable”, “Los heraldos negros”; uno a uno los poemas del inmortal ciudadano de Santiago de Chuco fueron siendo declamados haciendo las delicias de los presentes.
El director de la Biblioteca Municipal “César Vallejo y Centenario”, Paulino Meléndez, a su vez organizador del evento, destacó la asistencia de público y el interés mostrado estos días por el público en la exposición de todos los libros publicados por César Vallejo. “Nos comprometemos a continuar trabajando por el desarrollo cultural de nuestro pueblo, ojalá en otros eventos que vamos a programar nos sigan acompañando”, subrayó nuestro entrevistado.
Un nutrido auditorio acompañó el martes pasado el recital de homenaje en conmemoración de los 70 años de la desaparición física del vate peruano y universal César Vallejo, realizado en el Centro Cultural Centenario. Los declamadores que protagonizaron el acto cultural fueron los reconocidos Jorge Álvarez Bocanegra y Róger Velásquez Torres, quienes se llevaron el aplauso de los asistentes.
“Masa”, “Trilce”, “La cena miserable”, “Los heraldos negros”; uno a uno los poemas del inmortal ciudadano de Santiago de Chuco fueron siendo declamados haciendo las delicias de los presentes.
El director de la Biblioteca Municipal “César Vallejo y Centenario”, Paulino Meléndez, a su vez organizador del evento, destacó la asistencia de público y el interés mostrado estos días por el público en la exposición de todos los libros publicados por César Vallejo. “Nos comprometemos a continuar trabajando por el desarrollo cultural de nuestro pueblo, ojalá en otros eventos que vamos a programar nos sigan acompañando”, subrayó nuestro entrevistado.
Poemario de Ricardo Ayllón se presenta en Huarás
“Un poco de aire en una boca impura”
Este viernes a las 7 de la noche en el auditorio “Mariscal Luzuriaga” de la comuna de Huarás se presenta el libro del poeta chimbotano Ricardo Ayllón “Un poco de aire en una boca impura” (Ediciones Altazor, Lima, 2008). Los comentarios estarán a cargo del docente universitario Carlos Toledo Quiñones y del crítico Miguel Chereque.
En palabras de la joven poeta Denisse Vega Farfán, este “nuevo libro de Ricardo Ayllón se esfuerza no solo en otorgar a la poesía formas dignas mediante el trabajo cada vez más depurado de la palabra y el logro de la imagen, la sensación, el recrear el tacto de lo subjetivo y lo real, el arrojo, la espontaneidad, la lucidez y la frescura; sino que a ello se suman sus vibrantes y cuestionantes temáticas, de una resistencia contagiante aunque en medio de un espiral de cadáveres”.
El poeta limeño Johnny Barbieri (Ex Noble Caterva) también se ha referido al conjunto de poemas presentado en Chimbote hace algunas semanas, advirtiendo: “este libro sorprende porque no se limita en ser un libro bien escrito, sino en ser un libro de apuesta. No se trata de captar las efusiones de la naturaleza y expresarlas tal cual llegan a ti, sino de reinventarlas, de hacerlas tuyas; es allí donde radica el valor de todo gran libro”.
Este viernes a las 7 de la noche en el auditorio “Mariscal Luzuriaga” de la comuna de Huarás se presenta el libro del poeta chimbotano Ricardo Ayllón “Un poco de aire en una boca impura” (Ediciones Altazor, Lima, 2008). Los comentarios estarán a cargo del docente universitario Carlos Toledo Quiñones y del crítico Miguel Chereque.
En palabras de la joven poeta Denisse Vega Farfán, este “nuevo libro de Ricardo Ayllón se esfuerza no solo en otorgar a la poesía formas dignas mediante el trabajo cada vez más depurado de la palabra y el logro de la imagen, la sensación, el recrear el tacto de lo subjetivo y lo real, el arrojo, la espontaneidad, la lucidez y la frescura; sino que a ello se suman sus vibrantes y cuestionantes temáticas, de una resistencia contagiante aunque en medio de un espiral de cadáveres”.
El poeta limeño Johnny Barbieri (Ex Noble Caterva) también se ha referido al conjunto de poemas presentado en Chimbote hace algunas semanas, advirtiendo: “este libro sorprende porque no se limita en ser un libro bien escrito, sino en ser un libro de apuesta. No se trata de captar las efusiones de la naturaleza y expresarlas tal cual llegan a ti, sino de reinventarlas, de hacerlas tuyas; es allí donde radica el valor de todo gran libro”.
sábado, 12 de abril de 2008
Muerte al amanecer*
César Lévano
Hace 25 años, un día del cual tengo el cruel recuerdo, murió Juan Gonzalo Rose, el poeta que puso en las palabras una música que canta desde lejos.
Anoche, en el homenaje que estudiantes de Administración de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos rindieron en la Casona a Melissa Patiño, la joven poeta injustamente encarcelada, recordé los días en que nuestra juventud fue herida por la prisión y las torturas, y por el destierro. Recordé asimismo que las dictaduras pasan, pero que la lucha por el pan, la justicia y la libertad no se apagan.
Por eso mismo, mi mejor homenaje a Juan Gonzalo Rose es protestar contra el crimen que se comete contra Melissa y sus compañeros de prisión.
Yo les grito a los tiranos de hoy: ¡no enturbien el alma de los jóvenes! ¡no castiguen sus sueños ni sus cantos!
El día en que la muerte nos arrebató a Juan Gonzalo escribí una crónica en que recordé estos versos de Heinrich Heine, el genial poeta alemán: Aus meinem grosse Schmerzen / mach ich die kleine Liedern (= De mis grandes dolores hago pequeños cantos).
Lo castigaron, nos castigaron. Como ahora, los amos de turno tenían miedo a las ideas, a la inteligencia, a los artistas, a la lucha del pueblo. Metieron presos, y hubo más luchadores. Metieron bala (como en Ayacucho estos días), y las masas se envalentonaron.
A Juan Gonzalo le siguen teniendo miedo. Como Vallejo, sigue siendo incómodo. En enero último, cuando el Instituto Nacional de Cultura presentó su edición de las obras completas del poeta, precisé que no eran completas. Entre los poemas faltaba el incandescente "Voz de orden" y entre las letras de canciones se había omitido la que dedicó a la guerrilla de Luis de la Puente, y al cual Manuel Acosta Ojeda ha transmutado en hermoso yaraví.
Con todo desparpajo, leí entonces el poema omitido y entoné la olvidada canción. ¿Olvidada? En la Casona sanmarquina la entonó anoche Margot Palomino, quien recordó que yo se la he enseñado. Escuchando esa voz hermosa y firme, pensé: Juan Gonzalo, los tiranos pasan, las canciones se alojan en el corazón del pueblo, que es eterno.En una entrevista para el semanario Marka planteé a Rose un cuestionario basado en versos de René Char. ¿Qué te suscitan, le dije, estas palabras: El poema es el amor realizado del deseo que sigue siendo deseo? Su respuesta fue rápida como un relámpago: "Me recuerda algo que yo siempre he pensado: La esperanza es lo último que se pierde, una vez que se ha perdido toda esperanza".
Había escrito: "Llegado será el día / en que pueda decirse: / frío como la nieve / y feliz como el hombre".
Toda la poesía de Rose es una antorcha de congoja, amor y esperanza. Su juventud de cárcel, destierro, pobreza, nos grita: ¡no a la injusticia! ¡no a la represión! (La represión es el otro nombre de la injusticia).
* Tomado de La Primera del día de hoy.
* La foto corresponde a la portada de la plaqueta recientemente editada por Hipocampo y distribuida anoche en el recital de la Casona de San Marcos.
viernes, 11 de abril de 2008
Ir por el Perú buscando escritores…
Entrevista a Francisco Ángeles a propósito del reciente lanzamiento de porta9, el descentralizador portal de internet dedicado a la literatura peruana
Augusto Rubio Acosta
Conocíamos a Francisco Ángeles de las culturales de los diarios limeños (por lectura, se entiende), pero también de El Hablador, la siempre enterada página electrónica que siempre visitamos. Una mañana soleada encontramos a Francisco en la plaza y lo acompañamos en su prolongado latear por Chimbote. La razón de su visita abrigaba el deseo de conversar, entrevistar y grabar una serie de vídeos con poetas y narradores portuarios. Así, visitamos uno a uno a los autores de esta parte del país; los hallamos entre libros, en los bares y en heladerías de nuestra anodina plaza principal. ¿El resultado? Los vídeos pronto aparecerán en la internet (apenas pudimos ver el trailer) y en cierto programa de TV. Mientras, como adelanto, esta sucinta conversa:
Cuéntanos Francisco, ¿qué persigue porta9?
Supongo que el objetivo es más o menos el mismo que el de todos los proyectos literarios: ofrecer una nueva alternativa, cubrir los vacíos. Lo que marca la diferencia son los mecanismos con los que vamos a conseguirlo, en lo que estamos siendo innovadores. Y también, estoy seguro, en la calidad de nuestro trabajo.
¿Existen diferencias sustanciales entre porta9 y otras webs o blogs de literatura peruana?
Hay varias diferencias, pero la principal es que ofrecemos contenidos propios: las entrevistas, reseñas y artículos publicados en Porta9 son producidos exclusivamente para el portal. No existe ni ha existido nunca en el Perú una página virtual que produzca semanalmente esos contenidos y no se limite a ser una acumulación de enlaces y copy paste de diarios u otros blogs. Fuera de eso, las entrevistas son en video, algo que nadie ha hecho aquí en páginas literarias. Y lo tercero, ir por el Perú buscando escritores y observando el panorama literario para ir en contra de esa idea de hablar de literatura peruana cuando en realidad se está hablando de literatura producida en Lima o desde el extranjero.
¿Por qué apostar por una verdadera descentralización de la literatura peruana?
Había tenido noticias de lo que pasaba en algunas ciudades del Perú, como por ejemplo en Chimbote. En Lima yo conocía a los escritores, críticos, editores, periodistas culturales, etc., y sin embargo no me llegaban noticias al respecto. Entonces pensaba que si yo no conocía nada de esa realidad, el público lector menos. Lo único que he hecho es acercarme a ella para conocerla y ponerla a disposición de quienes también la quieran conocer.
Si en Lima, se supone, no se conoce nada de los escritores de provincia, ¿cuáles son las razones por las que cuando alguno de ellos presenta su libro en la capital o protagoniza algún evento cultural de importancia no tiene espacio en los medios de comunicación?
Precisamente por eso: porque no son conocidos. Y la cantidad de escritores que esperan su espacio es muy numerosa y no todos pueden tener cobertura. La única manera de ganarse un espacio es ir hacia la prensa y no sentarse a esperar que la prensa venga, porque muy probablemente nunca va a llegar.
¿Consideras que las páginas culturales de los medios limeños marginan al escritor de provincia? ¿Por qué no se les hace espacio?
La cobertura en prensa siempre ha sido muy restringida, por lo que la gran mayoría de gente que publica nunca ha aparecido en ningún medio. Lo que pasa es que cuando quien no aparece es provinciano, le queda la idea de que su origen es el factor que no le permite tener ese espacio. Igual con las mujeres, que creen que no les dan bola por ser mujeres. Pero lo cierto es que muchos limeños, la gran mayoría, tampoco consiguen ese espacio. Así que creo que la pregunta sería cómo así algunos escritores logran aparecer continuamente y los otros, que son muchos más, no lo consiguen. No aparecer es la regla. Habría que preguntarse cómo alguien se convierte en excepción.
¿Cómo has encontrado la movida literaria en Chimbote?
Por un lado, me sorprendió gratamente la autocrítica de críticos y creadores con respecto a su propia obra. Eso siempre, independientemente de la calidad de la obra, es saludable e incluso necesario para mejorar. Y también un interés y un movimiento muy grande en torno a la literatura: publicaciones, revistas, etc. Por el otro, la calidad humana que encontré. Gente como Ricardo Ayllón, Denisse Vega y tú mismo, que me hicieron sentir muy cómodo en el puerto y a quienes estoy infinitamente agradecido.
¿Qué opinión te merecen los blogs o webs literarias de provincias que ahora incluyes en tu lista de enlaces en Porta9?
No hago distinción entre si son de provincias o de Lima. Precisamente de eso se trata la página. Pero en general, todas son interesantes, por algo están enlazadas.
Usted debe saber que...
Francisco Ángeles es escritor y ahora periodista cultural. Con www.porta9.com, sin duda, se está inaugurando una nueva etapa en el tratamiento de la información sobre la literatura peruana, un espacio en formato de vídeo y de lectura hasta ahora vedado para los escritores del interior del país que producen en muchos casos mejor y más literatura que en la centralista capital.
Augusto Rubio Acosta
Conocíamos a Francisco Ángeles de las culturales de los diarios limeños (por lectura, se entiende), pero también de El Hablador, la siempre enterada página electrónica que siempre visitamos. Una mañana soleada encontramos a Francisco en la plaza y lo acompañamos en su prolongado latear por Chimbote. La razón de su visita abrigaba el deseo de conversar, entrevistar y grabar una serie de vídeos con poetas y narradores portuarios. Así, visitamos uno a uno a los autores de esta parte del país; los hallamos entre libros, en los bares y en heladerías de nuestra anodina plaza principal. ¿El resultado? Los vídeos pronto aparecerán en la internet (apenas pudimos ver el trailer) y en cierto programa de TV. Mientras, como adelanto, esta sucinta conversa:
Cuéntanos Francisco, ¿qué persigue porta9?
Supongo que el objetivo es más o menos el mismo que el de todos los proyectos literarios: ofrecer una nueva alternativa, cubrir los vacíos. Lo que marca la diferencia son los mecanismos con los que vamos a conseguirlo, en lo que estamos siendo innovadores. Y también, estoy seguro, en la calidad de nuestro trabajo.
¿Existen diferencias sustanciales entre porta9 y otras webs o blogs de literatura peruana?
Hay varias diferencias, pero la principal es que ofrecemos contenidos propios: las entrevistas, reseñas y artículos publicados en Porta9 son producidos exclusivamente para el portal. No existe ni ha existido nunca en el Perú una página virtual que produzca semanalmente esos contenidos y no se limite a ser una acumulación de enlaces y copy paste de diarios u otros blogs. Fuera de eso, las entrevistas son en video, algo que nadie ha hecho aquí en páginas literarias. Y lo tercero, ir por el Perú buscando escritores y observando el panorama literario para ir en contra de esa idea de hablar de literatura peruana cuando en realidad se está hablando de literatura producida en Lima o desde el extranjero.
¿Por qué apostar por una verdadera descentralización de la literatura peruana?
Había tenido noticias de lo que pasaba en algunas ciudades del Perú, como por ejemplo en Chimbote. En Lima yo conocía a los escritores, críticos, editores, periodistas culturales, etc., y sin embargo no me llegaban noticias al respecto. Entonces pensaba que si yo no conocía nada de esa realidad, el público lector menos. Lo único que he hecho es acercarme a ella para conocerla y ponerla a disposición de quienes también la quieran conocer.
Si en Lima, se supone, no se conoce nada de los escritores de provincia, ¿cuáles son las razones por las que cuando alguno de ellos presenta su libro en la capital o protagoniza algún evento cultural de importancia no tiene espacio en los medios de comunicación?
Precisamente por eso: porque no son conocidos. Y la cantidad de escritores que esperan su espacio es muy numerosa y no todos pueden tener cobertura. La única manera de ganarse un espacio es ir hacia la prensa y no sentarse a esperar que la prensa venga, porque muy probablemente nunca va a llegar.
¿Consideras que las páginas culturales de los medios limeños marginan al escritor de provincia? ¿Por qué no se les hace espacio?
La cobertura en prensa siempre ha sido muy restringida, por lo que la gran mayoría de gente que publica nunca ha aparecido en ningún medio. Lo que pasa es que cuando quien no aparece es provinciano, le queda la idea de que su origen es el factor que no le permite tener ese espacio. Igual con las mujeres, que creen que no les dan bola por ser mujeres. Pero lo cierto es que muchos limeños, la gran mayoría, tampoco consiguen ese espacio. Así que creo que la pregunta sería cómo así algunos escritores logran aparecer continuamente y los otros, que son muchos más, no lo consiguen. No aparecer es la regla. Habría que preguntarse cómo alguien se convierte en excepción.
¿Cómo has encontrado la movida literaria en Chimbote?
Por un lado, me sorprendió gratamente la autocrítica de críticos y creadores con respecto a su propia obra. Eso siempre, independientemente de la calidad de la obra, es saludable e incluso necesario para mejorar. Y también un interés y un movimiento muy grande en torno a la literatura: publicaciones, revistas, etc. Por el otro, la calidad humana que encontré. Gente como Ricardo Ayllón, Denisse Vega y tú mismo, que me hicieron sentir muy cómodo en el puerto y a quienes estoy infinitamente agradecido.
¿Qué opinión te merecen los blogs o webs literarias de provincias que ahora incluyes en tu lista de enlaces en Porta9?
No hago distinción entre si son de provincias o de Lima. Precisamente de eso se trata la página. Pero en general, todas son interesantes, por algo están enlazadas.
Usted debe saber que...
Francisco Ángeles es escritor y ahora periodista cultural. Con www.porta9.com, sin duda, se está inaugurando una nueva etapa en el tratamiento de la información sobre la literatura peruana, un espacio en formato de vídeo y de lectura hasta ahora vedado para los escritores del interior del país que producen en muchos casos mejor y más literatura que en la centralista capital.
Vallejo, siempre Vallejo...
jueves, 10 de abril de 2008
Autobiografía
Juan Cristóbal
Me pervierto cuando hablo de mi vida
Cuando pienso en las raíces oscuras de mi sino
En la sinceridad imberbe de las plantas
En las heridas inocuas de los cielos
En los ojos infernales de los perros /
Mi vida / como veis /
Está llena de sapos y culebras
Alimañas y ladrones
Y no sé descifrar las miradas que me miran
Las palabras que me hablan
Los silencios que me quieren /
Por eso creo que la vida es una mierda
Un pedazo de locura atravesando los desiertos
Que nos hace creer -ingenuamente-
Que la felicidad es lo único valedero en el concierto
Para aceptar la delicia indispensable para ello:
Que la existencia es otra historia / otro espacio / otro modo
De ver la desvergüenza de los días
Los callejones intransitables de la muerte /
Pero todo /
si lo entendéis bien / desde la miseria de los gritos /
No es sino una mentira inventada en el principio
Un desliz fatigado y envejecido en las ojeras de los gatos
Una forma reiterativa de amarrarnos a la mazmorra del olvido
A los mástiles palurdos y encebollados de los miedos /
Por eso envejezco sin hablarle a mis parientes
Sin mentarle la madre a los pendejos
Sin hacerle caso a los organilleros en los parques /
Y si miro de reojo a las muchachas
O fumo o sonrío en los prostíbulos baratos
Es una forma de agradecer a los vecinos
El estar vivo en este mundo
Soportando los chismes de la lluvia
Las injurias de los tontos
Y para hacerles creer a los incautos
Que me masturbo con las flores y las nubes y el mar
ricotón de las delicias
Cuando -en verdad-
Solo pienso en las figuras simiescas del delito
En los paisajes abandonados de las ruinas /
Por eso es que prefiero los fulgores desorbitados del pasado
A la codicia fervorosa y rudimentaria del futuro
Que siempre aparece y desaparece en las colinas
Como el rostro más oscuro y tenebroso de los tiempos /
De allí las preguntas que se me salen como trompos
del fondo del pellejo:
¿Qué soy -realmente- en este mundo?:
¿Un moscardón rondando los arrabales de la noche?
¿Una sombra extraviada en los umbrales del delirio?
¿La melodía perdida y enloquecedora de los niños?
¿O ese geranio desatado en las tierras baldías del peligro ? /
Como las respuestas no llegan como quiero
No me queda más remedio
Que seguir siendo el silencio de una voz desconocida
Revelando sus secretos a la inocencia de la oruga
a los huevecitos pasados de los grillos /
Mientras siento desbocarse tiernamente mis aullidos
como un fantasma
Por los restos de un universo sin sentido
Y entrar por esa puerta que jamás volverá abrirse
A no ser para encontrarse con las telarañas del vacío /
De este modo reconozco que la tristeza y la muerte
Son mis amigas y enemigas en el sueño
Compañeras inseparables de los mendigos y boxeadores
en el alba
De los poetas y jubilados en la tierra /
Y si se aman y comprenden
Como el sol cuando se arrecha con la luna en los hospicios
de la nada
Es porque les encanta viajar juntas
Hacerse arrumacos en todas las tabernas
Darse besitos en los asilos desesperados de la playa
Mientras derraman sus garbos y lisuras
Y sus voces insepultas
En todo el confín azul del universo.
* Tomado del poemario inédito "Para olvidar a la muerte". Poema reproducido hace unas horas en vosquedepalabrasvives.blogspot.com
Me pervierto cuando hablo de mi vida
Cuando pienso en las raíces oscuras de mi sino
En la sinceridad imberbe de las plantas
En las heridas inocuas de los cielos
En los ojos infernales de los perros /
Mi vida / como veis /
Está llena de sapos y culebras
Alimañas y ladrones
Y no sé descifrar las miradas que me miran
Las palabras que me hablan
Los silencios que me quieren /
Por eso creo que la vida es una mierda
Un pedazo de locura atravesando los desiertos
Que nos hace creer -ingenuamente-
Que la felicidad es lo único valedero en el concierto
Para aceptar la delicia indispensable para ello:
Que la existencia es otra historia / otro espacio / otro modo
De ver la desvergüenza de los días
Los callejones intransitables de la muerte /
Pero todo /
si lo entendéis bien / desde la miseria de los gritos /
No es sino una mentira inventada en el principio
Un desliz fatigado y envejecido en las ojeras de los gatos
Una forma reiterativa de amarrarnos a la mazmorra del olvido
A los mástiles palurdos y encebollados de los miedos /
Por eso envejezco sin hablarle a mis parientes
Sin mentarle la madre a los pendejos
Sin hacerle caso a los organilleros en los parques /
Y si miro de reojo a las muchachas
O fumo o sonrío en los prostíbulos baratos
Es una forma de agradecer a los vecinos
El estar vivo en este mundo
Soportando los chismes de la lluvia
Las injurias de los tontos
Y para hacerles creer a los incautos
Que me masturbo con las flores y las nubes y el mar
ricotón de las delicias
Cuando -en verdad-
Solo pienso en las figuras simiescas del delito
En los paisajes abandonados de las ruinas /
Por eso es que prefiero los fulgores desorbitados del pasado
A la codicia fervorosa y rudimentaria del futuro
Que siempre aparece y desaparece en las colinas
Como el rostro más oscuro y tenebroso de los tiempos /
De allí las preguntas que se me salen como trompos
del fondo del pellejo:
¿Qué soy -realmente- en este mundo?:
¿Un moscardón rondando los arrabales de la noche?
¿Una sombra extraviada en los umbrales del delirio?
¿La melodía perdida y enloquecedora de los niños?
¿O ese geranio desatado en las tierras baldías del peligro ? /
Como las respuestas no llegan como quiero
No me queda más remedio
Que seguir siendo el silencio de una voz desconocida
Revelando sus secretos a la inocencia de la oruga
a los huevecitos pasados de los grillos /
Mientras siento desbocarse tiernamente mis aullidos
como un fantasma
Por los restos de un universo sin sentido
Y entrar por esa puerta que jamás volverá abrirse
A no ser para encontrarse con las telarañas del vacío /
De este modo reconozco que la tristeza y la muerte
Son mis amigas y enemigas en el sueño
Compañeras inseparables de los mendigos y boxeadores
en el alba
De los poetas y jubilados en la tierra /
Y si se aman y comprenden
Como el sol cuando se arrecha con la luna en los hospicios
de la nada
Es porque les encanta viajar juntas
Hacerse arrumacos en todas las tabernas
Darse besitos en los asilos desesperados de la playa
Mientras derraman sus garbos y lisuras
Y sus voces insepultas
En todo el confín azul del universo.
* Tomado del poemario inédito "Para olvidar a la muerte". Poema reproducido hace unas horas en vosquedepalabrasvives.blogspot.com
martes, 8 de abril de 2008
La derecha: presa de desesperación
Gran Jornada Cultural y Recital Poético este viernes 11 de abril a las 9: 30 p.m. en el Bulevar Quilca
César Hildebrandt
Melissa Patiño Hinostroza tiene 20 años y piensa que el mundo puede ser distinto. O sea que piensa que los pobres no tienen por qué ser eternos, que la neumonía no debería cundir en cada invierno de las callejuelas, que el doctor García podría ser menos ahijadito de Bush, Bush menos padrino de la mafia de Cheney, el dinero menos principal y la posibilidad de mirar las musarañas y no morir a manos de un microbusista, algo menos remoto de lo que es ahora.
En fin, Melissa Patiño tiene 20 años, estudia Administración de Empresas en San Marcos, escribe poesía, es miembro del grupo cultural "Círculo del sur", trabaja en la producción del programa radial "Todas las voces" (Radio Stereo Villa 101.7) y, representando justamente al director de ese programa, acudió al segundo encuentro de la Coordinadora Continental Bolivariana, que se realizó a puertas abiertas en Quito, Ecuador, con delegaciones juveniles del país anfitrión más Venezuela, Uruguay, Brasil, Perú, Argentina y Cuba.
De regreso al Perú, Melissa tomó un ómnibus puesto a disposición por los organizadores del evento. Al cruzar la frontera, en Aguas Verdes, fue detenida por la policía política peruana, esposada, fotografiada, grabada por las cámaras solícitas de la televisión y exhibida en la prensa como "una de las terroristas que estuvieron en una reunión en Quito, donde se tramó cómo sabotear las cumbres de jefes de Estado que está preparando el Perú".
Melissa Patiño no pertenece al MRTA ni simpatiza con ese grupo que, en efecto, confundió la rebeldía de los pueblos con el asesinato sectario. Tampoco, desde luego, tiene que ver con Sendero, la sucursal del difunto Khmer Rouge en el Perú. Es más, Melissa no tiene ejercicio partidario alguno y si en alguna juventud milita es en la suya, que apuesta por la cultura como agenciadora de mejores tiempos y en los recitales como pretexto para conocer a gente de palabra. Melissa no es una guerrillera pero tampoco cree que este sistema, que hiede a la legua, pertenezca, como cree ahora el doctor García, a la esfera de lo sagrado. No, por supuesto.
Pero hay que ser tan obtuso como Alva Castro, tan brutalmente fascista como el jefe de esa policía que el Apra ha ensillado, para decir que en Quito, durante ¬una cita tumultuosa de 800 personas, a tiro de cámaras de TV y periodistas de todo calibre, se complotó para arruinar de modo sangriento las cumbres que se llevarán a cabo en el Perú. Si así hubiese sido, el gobierno de Correa es el que habría tomado cartas en el asunto. No, general Octavio Salazar: que Alfaro viva, carajo, no tiene que ver en este ¬asunto: en Quito hubo una reunión juvenil internacional donde se habló de la economía globalizada, del hambre también internacional, de las conjuras de Washington en relación a América Latina (a las que usted sirve sin saberlo), de las maquinarias represivas (de las que usted es emblema), de Bolívar y Martí (par de subversivos, oiga usted) y donde, en un momento dado, las FARC aprovecharon para lanzar un vídeo de Raúl Reyes, vídeo que resultó testamentario porque, días después, las fuerzas combinadas colombo-norteamericanas ¬agujerearon su escondite invadiendo, precisamente, territorio del Ecuador, fíjese usted.
Decir que todos los que vieron un vídeo de Raúl Reyes están dispuestos a dinamitar los hoteles cinco estrellas de Lima cuando la Apec despliegue su agenda en Lima en medio de miles de policías encubiertos, eso es algo que sería sólo mostachudamente ridículo, como usted mi general, si Melissa Patiño no estuviese presa en Santa Mónica.
En la hipótesis negada de que Melissa tuviera alguna cercanía amistosa con gente que quiere hacer del MRTA un partido político, ¿qué diablos habría de punible en ¬eso? Semanas después de su detención, la policía de los Alva Castro no ha mostrado una sola prueba que justifique la detención de Melissa o la de los otros seis peruanos detenidos en la frontera norte y tratados como si este fuera el reino del Chivo Trujillo.
Un puñado de escritores e intelectuales que no salen en los periódicos, que no quieren salir en los periódicos, hicieron un plantón pidiendo la libertad de Melissa Patiño. La policía que el Apra quiere ensuciar hasta donde sea posible, cargó contra los manifestantes y los aporreó. ¿Para esto nos liberamos de Fujimori, mientras Agustín Mantilla –esa mugre dizque de aprismo irrenunciable– recibía dinero de Montesinos en la salita del SIN?
Sorprende, además, el silencio de la "cultura oficial". ¿Dónde están los que hubiesen puesto el grito en el cielo (legítimamente) si algo como lo de Melissa Patiño hubiese sucedido en la Venezuela de Chávez o en la Cuba de Castro? ¿Debajo de qué camas tiemblan o sobre qué camas se distraen los que deberían decir algo en relación a este periodo de intolerancia que el Apra, con la ¬anuencia de la prensa fenicia, está imponiendo?
¿Qué quiere el doctor García? ¿Imitar a Haya en sus volúmenes, en su viudedad doctrinaria y en su amor por las alianzas oscuras, pero terminar pareciéndose a ¬Odría en su entendimiento de la democracia? ¿Haya y ¬Odría en una sola persona? ¿La Coalición Apra-Uno hecha carne? ¿Y qué está pasando con la prensa peruana? Aparte del parricidio fáctico perpetrado por Gustavo Mohme Seminario, ¿qué otra cosa tendremos que lamentar?
¡Liberen a Melissa, manga de abusivos!
César Hildebrandt
Melissa Patiño Hinostroza tiene 20 años y piensa que el mundo puede ser distinto. O sea que piensa que los pobres no tienen por qué ser eternos, que la neumonía no debería cundir en cada invierno de las callejuelas, que el doctor García podría ser menos ahijadito de Bush, Bush menos padrino de la mafia de Cheney, el dinero menos principal y la posibilidad de mirar las musarañas y no morir a manos de un microbusista, algo menos remoto de lo que es ahora.
En fin, Melissa Patiño tiene 20 años, estudia Administración de Empresas en San Marcos, escribe poesía, es miembro del grupo cultural "Círculo del sur", trabaja en la producción del programa radial "Todas las voces" (Radio Stereo Villa 101.7) y, representando justamente al director de ese programa, acudió al segundo encuentro de la Coordinadora Continental Bolivariana, que se realizó a puertas abiertas en Quito, Ecuador, con delegaciones juveniles del país anfitrión más Venezuela, Uruguay, Brasil, Perú, Argentina y Cuba.
De regreso al Perú, Melissa tomó un ómnibus puesto a disposición por los organizadores del evento. Al cruzar la frontera, en Aguas Verdes, fue detenida por la policía política peruana, esposada, fotografiada, grabada por las cámaras solícitas de la televisión y exhibida en la prensa como "una de las terroristas que estuvieron en una reunión en Quito, donde se tramó cómo sabotear las cumbres de jefes de Estado que está preparando el Perú".
Melissa Patiño no pertenece al MRTA ni simpatiza con ese grupo que, en efecto, confundió la rebeldía de los pueblos con el asesinato sectario. Tampoco, desde luego, tiene que ver con Sendero, la sucursal del difunto Khmer Rouge en el Perú. Es más, Melissa no tiene ejercicio partidario alguno y si en alguna juventud milita es en la suya, que apuesta por la cultura como agenciadora de mejores tiempos y en los recitales como pretexto para conocer a gente de palabra. Melissa no es una guerrillera pero tampoco cree que este sistema, que hiede a la legua, pertenezca, como cree ahora el doctor García, a la esfera de lo sagrado. No, por supuesto.
Pero hay que ser tan obtuso como Alva Castro, tan brutalmente fascista como el jefe de esa policía que el Apra ha ensillado, para decir que en Quito, durante ¬una cita tumultuosa de 800 personas, a tiro de cámaras de TV y periodistas de todo calibre, se complotó para arruinar de modo sangriento las cumbres que se llevarán a cabo en el Perú. Si así hubiese sido, el gobierno de Correa es el que habría tomado cartas en el asunto. No, general Octavio Salazar: que Alfaro viva, carajo, no tiene que ver en este ¬asunto: en Quito hubo una reunión juvenil internacional donde se habló de la economía globalizada, del hambre también internacional, de las conjuras de Washington en relación a América Latina (a las que usted sirve sin saberlo), de las maquinarias represivas (de las que usted es emblema), de Bolívar y Martí (par de subversivos, oiga usted) y donde, en un momento dado, las FARC aprovecharon para lanzar un vídeo de Raúl Reyes, vídeo que resultó testamentario porque, días después, las fuerzas combinadas colombo-norteamericanas ¬agujerearon su escondite invadiendo, precisamente, territorio del Ecuador, fíjese usted.
Decir que todos los que vieron un vídeo de Raúl Reyes están dispuestos a dinamitar los hoteles cinco estrellas de Lima cuando la Apec despliegue su agenda en Lima en medio de miles de policías encubiertos, eso es algo que sería sólo mostachudamente ridículo, como usted mi general, si Melissa Patiño no estuviese presa en Santa Mónica.
En la hipótesis negada de que Melissa tuviera alguna cercanía amistosa con gente que quiere hacer del MRTA un partido político, ¿qué diablos habría de punible en ¬eso? Semanas después de su detención, la policía de los Alva Castro no ha mostrado una sola prueba que justifique la detención de Melissa o la de los otros seis peruanos detenidos en la frontera norte y tratados como si este fuera el reino del Chivo Trujillo.
Un puñado de escritores e intelectuales que no salen en los periódicos, que no quieren salir en los periódicos, hicieron un plantón pidiendo la libertad de Melissa Patiño. La policía que el Apra quiere ensuciar hasta donde sea posible, cargó contra los manifestantes y los aporreó. ¿Para esto nos liberamos de Fujimori, mientras Agustín Mantilla –esa mugre dizque de aprismo irrenunciable– recibía dinero de Montesinos en la salita del SIN?
Sorprende, además, el silencio de la "cultura oficial". ¿Dónde están los que hubiesen puesto el grito en el cielo (legítimamente) si algo como lo de Melissa Patiño hubiese sucedido en la Venezuela de Chávez o en la Cuba de Castro? ¿Debajo de qué camas tiemblan o sobre qué camas se distraen los que deberían decir algo en relación a este periodo de intolerancia que el Apra, con la ¬anuencia de la prensa fenicia, está imponiendo?
¿Qué quiere el doctor García? ¿Imitar a Haya en sus volúmenes, en su viudedad doctrinaria y en su amor por las alianzas oscuras, pero terminar pareciéndose a ¬Odría en su entendimiento de la democracia? ¿Haya y ¬Odría en una sola persona? ¿La Coalición Apra-Uno hecha carne? ¿Y qué está pasando con la prensa peruana? Aparte del parricidio fáctico perpetrado por Gustavo Mohme Seminario, ¿qué otra cosa tendremos que lamentar?
¡Liberen a Melissa, manga de abusivos!
domingo, 6 de abril de 2008
Mar por dentro
De la isla a la playa. Brazada y pasión del abuelo nadador
Augusto Rubio Acosta
El día que el abuelo cruzó a nado la vasta distancia de la isla a la playa, despertamos tarde, desayunamos ligero, olvidamos el sun block en casa y salimos raudos hacia la orilla del mar pensando en que el fuerte empuje de las olas, las mareas y el solazo en lo alto, podría ser aprovechado por el añoso nadador para sentir la electricidad que despide el océano cuando se le desafía, cuando se adentra uno en su sino.
Y ahí estábamos: el camarógrafo echando a correr su cinta para registrar la salida de la vieja casa-estudio de Gálvez, el conductor de la chalana que nos llevaría a la isla, el “abuelo nadador”, y este cimarrón aturdido aún por el sueño inconcluso y por sus propios fantasmas. En el embarcadero artesanal, Lincoln obvió los minutos de estiramiento, de ejercicios y olvidó pensar en la orientación que debía tener a la hora de la travesía; se acordó de las brazadas largas, de estirar los brazos tanto delante como detrás, pero jamás de protegerse del sol. Se limitó a perseguir a los cochos que revoloteaban alrededor nuestro, a bromear con las vendedoras de pescado y a intercambiar pareceres con los hombres de sal.
¡Qué tal…! El viejo grito de batalla volvía a sonar estentóreo al llegar a pie a La Caleta, mientras en las afueras de la Capitanía del Puerto unos trescientos cincuenta chimbotanos (además de ochenta nadadores) esperaban a los organizadores del evento y el inicio de la fiesta en el mar. Pero esta historia empezó hace cierto tiempo, ¿sabes?, se inició cuando -un buen día de 2007- el abuelo decidió volver a encontrarse consigo mismo, cuando empezó a nadar y a competir durante largas jornadas en la piscina del Vivero Forestal con la turba de “mojarrillas” que lo siguen a todas partes; en suma, cuando decidió hermanarse con el mar.
“Tú sabes cómo soy, cimarrón, conoces más o menos de cerca (de oídas más que en vivo y en directo) la acelerada vida que este viejo que tienes al frente ha llevado. ¿Recuerdas la lesión que me mantuvo medio año en el marasmo? Un tobillo lastimado a causa de los desinhibidos e inéditos estilos de natación que practico no me iba a detener... Qué bueno que estemos todos: mi familia toda (y en camiseta naranja), mis amigos, mis compañeros del agua (de la piscina también)…”.
Al mediodía, cuando el guardacostas dio la largada en la boya verde frente a la Isla Blanca, cuarenta nadadores (de las categorías mayores y másters) empezaron a pugnar con el mar. Cuando arrancó, el abuelo lo hizo en estilo espalda, con paciencia y sin apurarse; total: el asunto no era llegar primero (después confesaría), el asunto era llegar... Brazada a brazada, el añoso nadador nos remitió a los egipcios, a los fenicios y a los insoslayables cartagineses siempre en guerra, siempre en pugna, por dominar el Mediterráneo. Recordó –seguro- el “Libro de Leyes” de Platón, donde éste se pregunta: “¿debería confiarse un cargo oficial a personas que son lo contrario de gente culta, los cuales, según el proverbio, no saben ni nadar ni leer?”. Se imaginó enzarzado en una competencia al costado de Dionisios, junto a Aretusa de Elis e intentando cruzar el Naxos. Brazada a brazada, no había que dejarse fiar…
La corriente arrastró a algunos nadadores retrasando su avance en el océano. Los desertores (muchachos y maduros) empezaron a aparecer y a ser rescatados por el guardacostas. Un viento fuente arrastraba la chalana desde donde asistíamos a un domingo distinto y soleado en el mar de Chimbote. El abuelo recordó que no había diseñado circuito alguno para su recorrido en el mar (el precio del debut), olvidó dosificar sus energías conforme avanzaba e intentó nadar la segunda parte de los kilómetros del tramo hasta la orilla más rápido que la primera mitad. A pesar de las corrientes y el viento fuerte, se podía deducir cierta comodidad del nadador y una asombrosa flexibilidad de pies, hombros y cintura; bastaba sólo orientarlo a gritos para que se concentrara en nadar recto hacia la playa.
"El nadar, cimarrón, era considerado entre los romanos como uno de los elementos de la educación. Se enseñaba a nadar a los niños de ambos sexos. Tal importancia tenía la natación en Roma, que, al hablar de un ignorante, era vulgar la frase: «no sabe leer ni nadar». Asistían muchísimas mujeres a las piscinas, y los soldados eran, en su mayoría, excelentes nadadores. En la historia de Roma se citan casos en que grandes generales, y hasta emperadores, al frente de sus tropas y revestidos todos de sus corazas, atravesaron los ríos a nado". La voz del abuelo nadador -en su estudio de Gálvez -parecía sentirse en las chalanas que lo acompañaban en el mar, mientras nos acercábamos cada vez más a la orilla donde un marco espectacular de gente recibía a los primeros nadadores en la línea de meta.
¿Habrá sentido el septuagenario nadador el grito (de aliento) destemplado de los amigos, de la familia toda y de los curiosos y extraños que terminaron identificándose con este mar contaminado pero querido que ahora lo ve llegar a brazada limpia a esa orilla que un día fue casta e inmaculada, refugio de nuestros padres (irresponsables) que la dejaron perderse?, ¿le habrá contado el abuelo al mar (por dentro) su vida, locura y milagros?, ¿habrán intimado sobre las musas que se quedaron a dormir en sus aguas?, ¿le habrá salpicado su espuma inundada de misterio, tiempo, distancia, inmundicia, de lamento y de protesta de los que ahora asistimos –impotentes- a su tragedia?...
Cuando el abuelo nadador llegó a la playa proveniente de la Isla Blanca, sus pequeños nietos se abalanzaron a abrazarlo. Se extraviaron en palabras, afectos y buenas vibras difíciles de auscultar por el ruidoso recibimiento. Lo apabulló una marea de aplausos, de olas y resacas, de pies descalzos y arenados que pugnaban alcanzarlo, se dejó llevar por las numerosas fotografías que jamás se tomó en su vida, por las preguntas de la prensa y se perdió en las calles recién barridas de esa parte de La Caleta. La tarde que Lincoln llegó a la playa nos enseñó que los ancianos somos nosotros, que la perseverancia y la pasión existen y que el próximo año haremos lo posible por emular su hazaña, por lanzarnos (de una vez por todas) al mar, al mar…
Augusto Rubio Acosta
El día que el abuelo cruzó a nado la vasta distancia de la isla a la playa, despertamos tarde, desayunamos ligero, olvidamos el sun block en casa y salimos raudos hacia la orilla del mar pensando en que el fuerte empuje de las olas, las mareas y el solazo en lo alto, podría ser aprovechado por el añoso nadador para sentir la electricidad que despide el océano cuando se le desafía, cuando se adentra uno en su sino.
Y ahí estábamos: el camarógrafo echando a correr su cinta para registrar la salida de la vieja casa-estudio de Gálvez, el conductor de la chalana que nos llevaría a la isla, el “abuelo nadador”, y este cimarrón aturdido aún por el sueño inconcluso y por sus propios fantasmas. En el embarcadero artesanal, Lincoln obvió los minutos de estiramiento, de ejercicios y olvidó pensar en la orientación que debía tener a la hora de la travesía; se acordó de las brazadas largas, de estirar los brazos tanto delante como detrás, pero jamás de protegerse del sol. Se limitó a perseguir a los cochos que revoloteaban alrededor nuestro, a bromear con las vendedoras de pescado y a intercambiar pareceres con los hombres de sal.
¡Qué tal…! El viejo grito de batalla volvía a sonar estentóreo al llegar a pie a La Caleta, mientras en las afueras de la Capitanía del Puerto unos trescientos cincuenta chimbotanos (además de ochenta nadadores) esperaban a los organizadores del evento y el inicio de la fiesta en el mar. Pero esta historia empezó hace cierto tiempo, ¿sabes?, se inició cuando -un buen día de 2007- el abuelo decidió volver a encontrarse consigo mismo, cuando empezó a nadar y a competir durante largas jornadas en la piscina del Vivero Forestal con la turba de “mojarrillas” que lo siguen a todas partes; en suma, cuando decidió hermanarse con el mar.
“Tú sabes cómo soy, cimarrón, conoces más o menos de cerca (de oídas más que en vivo y en directo) la acelerada vida que este viejo que tienes al frente ha llevado. ¿Recuerdas la lesión que me mantuvo medio año en el marasmo? Un tobillo lastimado a causa de los desinhibidos e inéditos estilos de natación que practico no me iba a detener... Qué bueno que estemos todos: mi familia toda (y en camiseta naranja), mis amigos, mis compañeros del agua (de la piscina también)…”.
Al mediodía, cuando el guardacostas dio la largada en la boya verde frente a la Isla Blanca, cuarenta nadadores (de las categorías mayores y másters) empezaron a pugnar con el mar. Cuando arrancó, el abuelo lo hizo en estilo espalda, con paciencia y sin apurarse; total: el asunto no era llegar primero (después confesaría), el asunto era llegar... Brazada a brazada, el añoso nadador nos remitió a los egipcios, a los fenicios y a los insoslayables cartagineses siempre en guerra, siempre en pugna, por dominar el Mediterráneo. Recordó –seguro- el “Libro de Leyes” de Platón, donde éste se pregunta: “¿debería confiarse un cargo oficial a personas que son lo contrario de gente culta, los cuales, según el proverbio, no saben ni nadar ni leer?”. Se imaginó enzarzado en una competencia al costado de Dionisios, junto a Aretusa de Elis e intentando cruzar el Naxos. Brazada a brazada, no había que dejarse fiar…
La corriente arrastró a algunos nadadores retrasando su avance en el océano. Los desertores (muchachos y maduros) empezaron a aparecer y a ser rescatados por el guardacostas. Un viento fuente arrastraba la chalana desde donde asistíamos a un domingo distinto y soleado en el mar de Chimbote. El abuelo recordó que no había diseñado circuito alguno para su recorrido en el mar (el precio del debut), olvidó dosificar sus energías conforme avanzaba e intentó nadar la segunda parte de los kilómetros del tramo hasta la orilla más rápido que la primera mitad. A pesar de las corrientes y el viento fuerte, se podía deducir cierta comodidad del nadador y una asombrosa flexibilidad de pies, hombros y cintura; bastaba sólo orientarlo a gritos para que se concentrara en nadar recto hacia la playa.
"El nadar, cimarrón, era considerado entre los romanos como uno de los elementos de la educación. Se enseñaba a nadar a los niños de ambos sexos. Tal importancia tenía la natación en Roma, que, al hablar de un ignorante, era vulgar la frase: «no sabe leer ni nadar». Asistían muchísimas mujeres a las piscinas, y los soldados eran, en su mayoría, excelentes nadadores. En la historia de Roma se citan casos en que grandes generales, y hasta emperadores, al frente de sus tropas y revestidos todos de sus corazas, atravesaron los ríos a nado". La voz del abuelo nadador -en su estudio de Gálvez -parecía sentirse en las chalanas que lo acompañaban en el mar, mientras nos acercábamos cada vez más a la orilla donde un marco espectacular de gente recibía a los primeros nadadores en la línea de meta.
¿Habrá sentido el septuagenario nadador el grito (de aliento) destemplado de los amigos, de la familia toda y de los curiosos y extraños que terminaron identificándose con este mar contaminado pero querido que ahora lo ve llegar a brazada limpia a esa orilla que un día fue casta e inmaculada, refugio de nuestros padres (irresponsables) que la dejaron perderse?, ¿le habrá contado el abuelo al mar (por dentro) su vida, locura y milagros?, ¿habrán intimado sobre las musas que se quedaron a dormir en sus aguas?, ¿le habrá salpicado su espuma inundada de misterio, tiempo, distancia, inmundicia, de lamento y de protesta de los que ahora asistimos –impotentes- a su tragedia?...
Cuando el abuelo nadador llegó a la playa proveniente de la Isla Blanca, sus pequeños nietos se abalanzaron a abrazarlo. Se extraviaron en palabras, afectos y buenas vibras difíciles de auscultar por el ruidoso recibimiento. Lo apabulló una marea de aplausos, de olas y resacas, de pies descalzos y arenados que pugnaban alcanzarlo, se dejó llevar por las numerosas fotografías que jamás se tomó en su vida, por las preguntas de la prensa y se perdió en las calles recién barridas de esa parte de La Caleta. La tarde que Lincoln llegó a la playa nos enseñó que los ancianos somos nosotros, que la perseverancia y la pasión existen y que el próximo año haremos lo posible por emular su hazaña, por lanzarnos (de una vez por todas) al mar, al mar…
viernes, 4 de abril de 2008
Cuando el periodismo y la literatura se alían *
Notas sobre periodismo literario
Edmundo Paz Soldán
Algún día, cuando se escriba la historia literaria de la América Latina de principios de este siglo, se tendrá que reconocer que las grandes innovaciones de la prosa latinoamericana vinieron de la mano de los editores, de los cronistas, de los periodistas, de los escritores de non-fiction. En esa historia por contar se verá el notable papel de algunas revistas: Gatopardo (creada en Colombia, editada hoy en México), la peruana Etiqueta Negra, la colombiana El Malpensante, la chilena The Clinic, la mexicana Letras Libres, la brasileña Piauí, la argentina La Mano.
Una de las características fundamentales de estas revistas es su flexibilidad temática y formal. Si bien Julio Villanueva Chang, director fundador de Etiqueta Negra, menciona que la revista no es periodística ni literaria, lo cierto es que es ambas cosas a la vez; como dice Toño Angulo Daneri, uno de los periodistas de la primera etapa, Etiqueta Negra es "un bastión fundamentalista del periodismo narrativo". Andrés Hoyos, editor de El Malpensante -revista que se mueve cómodamente en el periodismo literario y sus diferentes géneros-, llega a aseverar contundente: "Nos interesan los textos bien escritos sin que importe mucho de qué hablan". Martín Pérez, integrante del consejo de dirección de La Mano, dice de esta revista de "cultura rock": "Aunque parezca que cultura y rock son dos palabras que no se llevan bien juntas..., en Argentina el rock siempre fue entendido como algo más que escuchar música: también tiene que ver con qué libros leer, qué películas ver y toda una forma de mirar el mundo". Letras Libres, por su parte, es una revista más ensayística, más de reflexión.
Estas revistas abrevan en tradiciones locales -Expreso Imaginario, para La Mano; la legendaria Vuelta de Octavio Paz, en el caso de Letras Libres-, pero la tradición anglosajona es sin duda más influyente: Vanity Fair, Mojo, Rolling Stone, Esquire, The New Yorker, Harper's, The New York Review of Books, Prospect. El ejemplo anglosajón aparece en todas partes: en la edición muy cuidada y la amplia extensión de los textos, en la extensa investigación que se hace para escribir las crónicas. El crítico Rafael Gumucio llega a sugerir que si para el boom los escritores norteamericanos importantes eran Faulkner y Hemingway, los que hoy cuentan no son escritores como Jonathan Franzen o David Foster Wallace, sino periodistas-ensayistas-cronistas como Janet Malcolm, Susan Orlean o Jon Lee Anderson. La renovación de la prosa latinoamericana tiene como punto de partida al nuevo periodismo norteamericano.
Mario Jursich, subdirector de El Malpensante, señala que una de las claves de la revista es su espíritu cosmopolita y el rechazo al "espíritu provinciano, sobre todo al considerar el inmenso protagonismo que éste ha tenido en un país de magra cultura como es Colombia". La paradoja de este cosmopolitismo es que los compartimentos estancos en los que se mueve la cultura de América Latina hacen que, en general, estas revistas sólo puedan ser conseguidas en sus respectivos países de publicación (las suscripciones internacionales son prohibitivas de tan caras). Gatopardo es la que más esfuerzos ha hecho por distribuirse en todo el continente: llega a quince países. En cuanto a la internacionalización, la gran mayoría o ha fracasado o ni se lo plantea; Letras Libres es una de las excepciones en este panorama, pues tiene una edición que se publica en España, con artículos y reseñas que no aparecen en la edición mexicana. Letras Libres también coloca toda la edición impresa en su sitio web, y tiene blogs, además de archivos muy completos, incluida toda la colección de Vuelta; lamentablemente, la mayoría de las revistas publica pocos artículos de la edición impresa y no ofrece mucho material propio; hay todavía miedo a que la competencia digital pueda devorar al papel.
Lo normal para estas revistas es tener un tiraje de entre 5.000 a 10.000 ejemplares. La Mano supera los 10.000; El Malpensante llega a casi 20.000, y Letras Libres a 38.000 en sus dos ediciones; Gatopardo es la más vendida: sus tres ediciones (mexicana, andina y pan-regional) llegan a 200.000 ejemplares. Debido al costo del papel, las revistas suelen ser caras y llegan sobre todo a los segmentos de la clase media, media-alta y alta. Esos costos hacen que sea de destacar cuando una revista cultural sobrevive un par de años en América Latina. Lo extraño, sin embargo, es que pese a que no todas estas revistas son comerciales, los anunciantes las apoyan. Daniel Titinger, nuevo director editorial de Etiqueta Negra, cree que lo que apoyan, en el fondo, es la continuidad.
En un continente tan inestable, el gran logro para muchos parece ser persistir, y durar. Los editores de estas revistas, por suerte, no parecen interesados en convertir la continuidad en un fin en sí mismo. Siguen arriesgando cada mes (o cada cuarenta y cinco días, en el caso de El Malpensante), con lo que es casi seguro que en un tiempo no todas seguirán con nosotros. Habrá malas noticias y contratiempos en esta historia, pero lo fundamental es que las bases están construidas para que se pueda hablar ya de una nueva gran tradición latinoamericana.
* Tomado del suplemento Babelia, El País, 29 de marzo 2008.
Edmundo Paz Soldán
Algún día, cuando se escriba la historia literaria de la América Latina de principios de este siglo, se tendrá que reconocer que las grandes innovaciones de la prosa latinoamericana vinieron de la mano de los editores, de los cronistas, de los periodistas, de los escritores de non-fiction. En esa historia por contar se verá el notable papel de algunas revistas: Gatopardo (creada en Colombia, editada hoy en México), la peruana Etiqueta Negra, la colombiana El Malpensante, la chilena The Clinic, la mexicana Letras Libres, la brasileña Piauí, la argentina La Mano.
Una de las características fundamentales de estas revistas es su flexibilidad temática y formal. Si bien Julio Villanueva Chang, director fundador de Etiqueta Negra, menciona que la revista no es periodística ni literaria, lo cierto es que es ambas cosas a la vez; como dice Toño Angulo Daneri, uno de los periodistas de la primera etapa, Etiqueta Negra es "un bastión fundamentalista del periodismo narrativo". Andrés Hoyos, editor de El Malpensante -revista que se mueve cómodamente en el periodismo literario y sus diferentes géneros-, llega a aseverar contundente: "Nos interesan los textos bien escritos sin que importe mucho de qué hablan". Martín Pérez, integrante del consejo de dirección de La Mano, dice de esta revista de "cultura rock": "Aunque parezca que cultura y rock son dos palabras que no se llevan bien juntas..., en Argentina el rock siempre fue entendido como algo más que escuchar música: también tiene que ver con qué libros leer, qué películas ver y toda una forma de mirar el mundo". Letras Libres, por su parte, es una revista más ensayística, más de reflexión.
Estas revistas abrevan en tradiciones locales -Expreso Imaginario, para La Mano; la legendaria Vuelta de Octavio Paz, en el caso de Letras Libres-, pero la tradición anglosajona es sin duda más influyente: Vanity Fair, Mojo, Rolling Stone, Esquire, The New Yorker, Harper's, The New York Review of Books, Prospect. El ejemplo anglosajón aparece en todas partes: en la edición muy cuidada y la amplia extensión de los textos, en la extensa investigación que se hace para escribir las crónicas. El crítico Rafael Gumucio llega a sugerir que si para el boom los escritores norteamericanos importantes eran Faulkner y Hemingway, los que hoy cuentan no son escritores como Jonathan Franzen o David Foster Wallace, sino periodistas-ensayistas-cronistas como Janet Malcolm, Susan Orlean o Jon Lee Anderson. La renovación de la prosa latinoamericana tiene como punto de partida al nuevo periodismo norteamericano.
Mario Jursich, subdirector de El Malpensante, señala que una de las claves de la revista es su espíritu cosmopolita y el rechazo al "espíritu provinciano, sobre todo al considerar el inmenso protagonismo que éste ha tenido en un país de magra cultura como es Colombia". La paradoja de este cosmopolitismo es que los compartimentos estancos en los que se mueve la cultura de América Latina hacen que, en general, estas revistas sólo puedan ser conseguidas en sus respectivos países de publicación (las suscripciones internacionales son prohibitivas de tan caras). Gatopardo es la que más esfuerzos ha hecho por distribuirse en todo el continente: llega a quince países. En cuanto a la internacionalización, la gran mayoría o ha fracasado o ni se lo plantea; Letras Libres es una de las excepciones en este panorama, pues tiene una edición que se publica en España, con artículos y reseñas que no aparecen en la edición mexicana. Letras Libres también coloca toda la edición impresa en su sitio web, y tiene blogs, además de archivos muy completos, incluida toda la colección de Vuelta; lamentablemente, la mayoría de las revistas publica pocos artículos de la edición impresa y no ofrece mucho material propio; hay todavía miedo a que la competencia digital pueda devorar al papel.
Lo normal para estas revistas es tener un tiraje de entre 5.000 a 10.000 ejemplares. La Mano supera los 10.000; El Malpensante llega a casi 20.000, y Letras Libres a 38.000 en sus dos ediciones; Gatopardo es la más vendida: sus tres ediciones (mexicana, andina y pan-regional) llegan a 200.000 ejemplares. Debido al costo del papel, las revistas suelen ser caras y llegan sobre todo a los segmentos de la clase media, media-alta y alta. Esos costos hacen que sea de destacar cuando una revista cultural sobrevive un par de años en América Latina. Lo extraño, sin embargo, es que pese a que no todas estas revistas son comerciales, los anunciantes las apoyan. Daniel Titinger, nuevo director editorial de Etiqueta Negra, cree que lo que apoyan, en el fondo, es la continuidad.
En un continente tan inestable, el gran logro para muchos parece ser persistir, y durar. Los editores de estas revistas, por suerte, no parecen interesados en convertir la continuidad en un fin en sí mismo. Siguen arriesgando cada mes (o cada cuarenta y cinco días, en el caso de El Malpensante), con lo que es casi seguro que en un tiempo no todas seguirán con nosotros. Habrá malas noticias y contratiempos en esta historia, pero lo fundamental es que las bases están construidas para que se pueda hablar ya de una nueva gran tradición latinoamericana.
* Tomado del suplemento Babelia, El País, 29 de marzo 2008.
jueves, 3 de abril de 2008
Periodismo cultural: nunca es tarde...
La noticia está en el poema,
en lo que sucede en el poema.
/ Ezra Pound
Augusto Rubio Acosta
Uno de los cuestionamientos más frecuentes a los que se ve enfrentado el trabajo cultural y el arte contemporáneo en general es su aparente carácter hermético y elitista. Una cultura que trabaja para pocos, que no es difundida por los medios de comunicación y que pocos entienden, un asunto organizado en una dinámica cerrada donde sólo pueden entrar entendidos o iniciados. Si bien es cierto en todo esto hay algo de verdadero, en honor a la verdad todo está teñido por un gran filtro de mitología y miedo: el temor a sentirse ignorante, a no captar nada, a pensar que otro sabe más que uno.
Desde el punto de vista ontológico y periodístico -y aunque suene reiterativo citarlo - prácticamente nadie tiene en cuenta el valor de lo que significa invertir en cultura para proyectarla en la mejora de nuestra sociedad. De los actores gubernamentales no nos vamos a ocupar (ya sabemos en qué andan, cómo disfrazan su aparente interés en la mejora educativa), tampoco diremos nada sobre cierto desgano que hemos notado, cierta desidia de parte de algunos (felizmente pocos) trabajadores culturales que contribuyen al marasmo existente en la ciudad en materia de difusión cultural.
De quienes nos vamos a ocupar en estas líneas es de aquellos que cargan a cuestas la gran responsabilidad de mantenernos informados. Ellos tienen la oportunidad de ser plurales y de poner en marcha y activar los espacios culturales al interior de la prensa para –en consecuencia- hacernos ingresar a una verdadera etapa de renovación, de desarrollo, y demostrar a la ciudadanía y a la opinión pública nacional los esfuerzos en materia cultural que surgen en Chimbote. La prensa local –con sus honrosas excepciones- no hace el más mínimo esfuerzo por develar el nuevo rostro que le dan los actores culturales a la ciudad que tanto queremos y eso urge cambiarlo.
El periodismo chimbotano jamás tuvo tanta materia prima -como existe ahora- a la cual recurrir para elaborar noticias culturales. Muchas cosas están pasando en la movida artística del puerto pero poco o nada se difunde a través de los medios. ¿No les importa?, ¿no lo entienden?, ¿dónde está su trascendencia?, ¿la cultura no vende?, ¿es un asunto de rating?... Se han aperturado nuevas ventanas, esfuerzos individuales y alternativos, es cierto, pero la mayoría de comunicadores se empeña en ejercer una marcada indiferencia hacia un tema que debería estar a diario en su mesa de trabajo.
El periodista está obligado a conocer y difundir los productos culturales de su sociedad a través del medio en el cual se desempeña; a adentrarse en la zona compleja y heterogénea de géneros y productos que abordan -con propósitos creativos, críticos, reproductivos o divulgatorios- los terrenos de las bellas artes, las letras, las corrientes del pensamiento, las ciencias sociales y humanas, la llamada “cultura popular” y muchos otros aspectos que tienen que ver con un tema tan importante como olvidado. El comunicador está obligado a educar y no sólo entretener.
En una ciudad como Chimbote, donde el periodismo cultural prácticamente no existe, urge desarrollar y promover espacios comunicacionales y periodistas comprometidos con el desarrollo y la difusión de la abundante actividad lúdica e intelectual que se realiza, así como echar un poco de luz sobre el espacio de intersección comprendido entre periodismo y cultura. Y no se trata de ir a cubrir noticias culturales solo “por amistad” ni tampoco de rogarle al editor del periódico o director de un programa de tevé para ir a cubrir presentaciones de libros y eventos culturales que se justifican por sí solos. ¿Cuándo llegará el día en que los medios planos tengan en portada una nota cultural?, ¿cuándo tendremos en los kioscos un semanario cultural de Chimbote?... En ese sentido, los editores o jefes de información de programas radiales y televisivos tienen la obligación moral de empezar a cambiar el ejercicio periodístico al interior de sus medios (las actividades lúdicas merecen mucho más espacio), lo que redundará en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos (de ellos mismos).
La sociedad no se va a motivar a participar activamente de la vida cultural si su propia prensa no les muestra ni motiva con los productos o acontecimientos culturales que no son pocos y que están ocurriendo día a día. En Chimbote se realizan eventos lúdicos de calidad y mayormente gratuitos, lo que sucede es que casi nadie los difunde. Si bien es cierto se necesita cierta especialización de los comunicadores en el área cultural, eso no es óbice para no iniciarse en el apasionante mundo de cubrir “las culturales”.
Tampoco vamos a soslayar aquí el pésimo rol que cumplen las universidades con su legión de graduados de indómita incultura (de eso vamos a hablar otro día, en otra circunstancia), pero algo debemos hacer para paliar el problema. La cultura, señores, que ahora está como “arrimada” en la casa del “periodismo”, fue quien construyó la casa, aunque suene paradójico. La prensa nació en el mundo letrado para el mundo letrado y es el ágora de un país de lectores que fue creciendo con la invención de la imprenta y volviéndose cada vez más importante (hasta degenerar en la prensa que hoy tenemos, por ejemplo en el Perú). Nunca es tarde para respetar a los oyentes, lectores, televidentes o cibernautas; es deber de los periodistas aumentar el nivel de la vida pública e introducir el tema cultural en el debate diario. No olvidemos que los grandes editores de medios escritos (radiales, televisados o electrónicos) son lectores exigentes, ellos respetan al lector como se respetan a sí mismos.
en lo que sucede en el poema.
/ Ezra Pound
Augusto Rubio Acosta
Uno de los cuestionamientos más frecuentes a los que se ve enfrentado el trabajo cultural y el arte contemporáneo en general es su aparente carácter hermético y elitista. Una cultura que trabaja para pocos, que no es difundida por los medios de comunicación y que pocos entienden, un asunto organizado en una dinámica cerrada donde sólo pueden entrar entendidos o iniciados. Si bien es cierto en todo esto hay algo de verdadero, en honor a la verdad todo está teñido por un gran filtro de mitología y miedo: el temor a sentirse ignorante, a no captar nada, a pensar que otro sabe más que uno.
Desde el punto de vista ontológico y periodístico -y aunque suene reiterativo citarlo - prácticamente nadie tiene en cuenta el valor de lo que significa invertir en cultura para proyectarla en la mejora de nuestra sociedad. De los actores gubernamentales no nos vamos a ocupar (ya sabemos en qué andan, cómo disfrazan su aparente interés en la mejora educativa), tampoco diremos nada sobre cierto desgano que hemos notado, cierta desidia de parte de algunos (felizmente pocos) trabajadores culturales que contribuyen al marasmo existente en la ciudad en materia de difusión cultural.
De quienes nos vamos a ocupar en estas líneas es de aquellos que cargan a cuestas la gran responsabilidad de mantenernos informados. Ellos tienen la oportunidad de ser plurales y de poner en marcha y activar los espacios culturales al interior de la prensa para –en consecuencia- hacernos ingresar a una verdadera etapa de renovación, de desarrollo, y demostrar a la ciudadanía y a la opinión pública nacional los esfuerzos en materia cultural que surgen en Chimbote. La prensa local –con sus honrosas excepciones- no hace el más mínimo esfuerzo por develar el nuevo rostro que le dan los actores culturales a la ciudad que tanto queremos y eso urge cambiarlo.
El periodismo chimbotano jamás tuvo tanta materia prima -como existe ahora- a la cual recurrir para elaborar noticias culturales. Muchas cosas están pasando en la movida artística del puerto pero poco o nada se difunde a través de los medios. ¿No les importa?, ¿no lo entienden?, ¿dónde está su trascendencia?, ¿la cultura no vende?, ¿es un asunto de rating?... Se han aperturado nuevas ventanas, esfuerzos individuales y alternativos, es cierto, pero la mayoría de comunicadores se empeña en ejercer una marcada indiferencia hacia un tema que debería estar a diario en su mesa de trabajo.
El periodista está obligado a conocer y difundir los productos culturales de su sociedad a través del medio en el cual se desempeña; a adentrarse en la zona compleja y heterogénea de géneros y productos que abordan -con propósitos creativos, críticos, reproductivos o divulgatorios- los terrenos de las bellas artes, las letras, las corrientes del pensamiento, las ciencias sociales y humanas, la llamada “cultura popular” y muchos otros aspectos que tienen que ver con un tema tan importante como olvidado. El comunicador está obligado a educar y no sólo entretener.
En una ciudad como Chimbote, donde el periodismo cultural prácticamente no existe, urge desarrollar y promover espacios comunicacionales y periodistas comprometidos con el desarrollo y la difusión de la abundante actividad lúdica e intelectual que se realiza, así como echar un poco de luz sobre el espacio de intersección comprendido entre periodismo y cultura. Y no se trata de ir a cubrir noticias culturales solo “por amistad” ni tampoco de rogarle al editor del periódico o director de un programa de tevé para ir a cubrir presentaciones de libros y eventos culturales que se justifican por sí solos. ¿Cuándo llegará el día en que los medios planos tengan en portada una nota cultural?, ¿cuándo tendremos en los kioscos un semanario cultural de Chimbote?... En ese sentido, los editores o jefes de información de programas radiales y televisivos tienen la obligación moral de empezar a cambiar el ejercicio periodístico al interior de sus medios (las actividades lúdicas merecen mucho más espacio), lo que redundará en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos (de ellos mismos).
La sociedad no se va a motivar a participar activamente de la vida cultural si su propia prensa no les muestra ni motiva con los productos o acontecimientos culturales que no son pocos y que están ocurriendo día a día. En Chimbote se realizan eventos lúdicos de calidad y mayormente gratuitos, lo que sucede es que casi nadie los difunde. Si bien es cierto se necesita cierta especialización de los comunicadores en el área cultural, eso no es óbice para no iniciarse en el apasionante mundo de cubrir “las culturales”.
Tampoco vamos a soslayar aquí el pésimo rol que cumplen las universidades con su legión de graduados de indómita incultura (de eso vamos a hablar otro día, en otra circunstancia), pero algo debemos hacer para paliar el problema. La cultura, señores, que ahora está como “arrimada” en la casa del “periodismo”, fue quien construyó la casa, aunque suene paradójico. La prensa nació en el mundo letrado para el mundo letrado y es el ágora de un país de lectores que fue creciendo con la invención de la imprenta y volviéndose cada vez más importante (hasta degenerar en la prensa que hoy tenemos, por ejemplo en el Perú). Nunca es tarde para respetar a los oyentes, lectores, televidentes o cibernautas; es deber de los periodistas aumentar el nivel de la vida pública e introducir el tema cultural en el debate diario. No olvidemos que los grandes editores de medios escritos (radiales, televisados o electrónicos) son lectores exigentes, ellos respetan al lector como se respetan a sí mismos.
martes, 1 de abril de 2008
La maestría del doctor Bueno
Augusto Rubio Acosta
La tarde en que Bueno llegó a matricularse en la maestría, jamás imaginó que el desarrollo del plan de estudios y su nuevo grado académico le resultarían gratuitos. Al recibir el sílabo se sintió reconfortado. Los cuatro cursos del primer ciclo serían para él –y en su modesta opinión de recién graduado como aboganster en una anónima y faltosa universidad- un paseo, pan comido, papayita, exceptuando las malditas matemáticas financieras que lo perseguían cada cierto tiempo en los cursos de especialización y en sus afanes de postgrado.
Origen de las parrandas I y El alcohol y su función como lubricante social, serán de lo más sencillo, pensó, acomodándose los anteojos oscuros (pa` que no sepan que está mirando). Pero si hasta Introducción a la jarra y el vaso, podría ser dictado por él mismo si alguien le daba el espacio para verter sus amplios conocimientos, experiencias múltiples y trabajos de campo.
Lo que le jodía de los cursos de los primeros meses de ese verano ardiente en Chimbote, era –definitivamente- el curso de Matemáticas financieras del bebedor. Cómo evitar pagar bebidas demás, cómo cobrar vueltos “olvidados” a los meseros, cómo calcular propinas, cómo meter “cabeza”, y otros... Él nunca supo sacar bien la cuenta (mucho menos dejar propina); desde sus inicios en el Oh qué bueno y El carro hundido, con la collera de la promo (de abogansters, claro), hasta sus últimas vueltas por El Pascualín, y sus cabeceadas en los bares del jirón Balta, siempre supo que ese sería su punto débil.
En el plan de estudios se encontró también con la relación de materias del siguiente periodo académico: Tragonometría I, El alcohol como sustituto del Psiquiatra (¿será posible?), Discusión I, Bebidas en la playa I (con tal que no sea la de Miramar, pensó), Introducción al manejo del tequila (ese sonaba nice), y un anodino Comidas y canciones que no combinan con el alcohol (¿?).
“El tratamiento primario comienza con el reconocimiento del alcoholismo como un problema que necesita atención específica, en vez de considerarlo secundario a otro problema subyacente como se hacía antaño. Se están desarrollando rápidamente residencias especializadas para su tratamiento y unidades específicas en los hospitales generales y psiquiátricos…”, alcanzó a leer en las revistas especializadas que se trajo de Lima en su último recorrido por el cardiólogo y por las fondas (culturosas) de Kilka, que finalmente le llegaron “a buen sitio”.
Sílabo en mano, los cursos del tercer periodo académico lo empezaron a preocupar. ¿Sería capaz de salir airoso de tamaña exigencia?... Tragonometría II, Importancia del cañazo en la toma de decisiones (¿estaba a punto de tomar una?), Logística y ubicación del trago, Consecuencias de conducir bajo efectos del alcohol (o sea cómo evitar que los mocosos esos egresados de la escuelita de Bellamar que ahora malconducen el tránsito te pongan multa) y Relatividad de la belleza de la mujer según el nivel del alcohol (ese sí que lo consideraba importante, imperdible).
A medida que avanzaba hacia su oficina en el jirón Leoncio Prado, pensó en el calor que hacía y en sus amigos de la noche anterior. ¿Y si les timbraba para un cebiche?... Recordó que el año anterior, cuando intentó asistir como alumno libre al curso de Técnicas avanzadas de cómo ocultar el tufo (o sea cómo hablar e inhalar al mismo tiempo), un cebichito con los viejos amigos de su insulsa promo del Raimondi le impidieron matricularse. Del pescado a la botella hay escaso trecho –pensó- y había que retomar la idea de salir airoso de los nuevos retos en materia académica.
Al llegar a su oficina, las secretarias y practicantes lo observaron con molestia. Una de ellas soltó una risita al tiempo que esparcía en el ambiente un poderoso ambientador. Volvió a bajar las escaleras; al llegar a la puerta del edificio sucedió: “Puta, Bueno, ya ni te dejas ver, chochera. ¿Dónde te vas?... Qué te has creído, oye… ¿Qué?, ¿o sea que porque ahora te codeas con la crema de la jurisprudencia, que andas con los encorbataos esos de medio pelo en el Piyéik (o sea PJ), ya ni tiempo tienes para tu gente, para tu mancha (triste y galvista), para tus patas de promo?... ¿qué?, ¿o sea que…?, a pux…
Terminaron en El Charly. “Tres meses promoción, tres meses he estado al margen; pero he vuelto entero, ¿no me ves?... Lima ya no me aguantaba, causa, tiempo que quería venirme; felizmente acá estoy, uno siempre extraña a la collera, y además el sitio ese donde me tenían encerrado y en “tratamiento”, la verdad que me jodía; hasta granos me empezaron a brotar en la nuca por el tiempazo que estuve adentro... ¡Salud, promoción…! ¡Mozo, tráete cuatro de una vez!... Como verás, yo ahora sólo me preocupo de mi maestría; manya, acabo de matricularme. Con el nuevo grado ya nadie me joderá…”.
La tarde se hacía noche mientras Bueno hablaba de la importancia de invertir en postgrados como el suyo: “Todo se ha globalizado, causa, hay que estar a la vanguardia. Se invierte, pues, pero qué se hace; tiempo, dinero, la vaina es estar actualizado y ser competitivo. ¿Si o no?... Yo lo primero que he visto ha sido la plana docente, el nivel que tienen, su experiencia profesional. Ahora, qué me iba yo a imaginar que terminaría enseñando algunas materias; será la vida, pues, será mi karma; ni cojinova que fuera para negarme yo a dictar, sobre todo si me va a salir gratis la vaina ésta… ¿Que qué sé yo de metodología?, ¿Qué hay que capitalizar la experiencia de los alumnos y del profesor?, ¿Qué cuántos egresados pienso insertar en el mercado laboral?...
La noche se apoderó de El Charly y las desinhibidas chicas de su vasto catálogo empezaron a abandonar su centro de trabajo. ¿Adónde nos vamos, chochera?, habla, pues… Y la gente, la promo, los cojuditos que lo habían seguido desde su insulsa oficina, apostaron por continuar la charla en el Chissita…
“El consumo excesivo de alcohol, como todos saben, destruye las neuronas, pero naturalmente ataca a las neuronas más lentas y débiles en primer lugar (si, claro). En este sentido, el consumo regular de cerveza elimina las neuronas más débiles, haciendo constantemente del cerebro una máquina más rápida y eficiente (caray). El resultado de este profundo estudio epidemiológico verifica y valida la relación causal entre las trancas de fin de semana y el rendimiento de los matemáticos, sociólogos, ingenieros, historiadores, escritores, médicos, abogansters, psicólogos, pintores, músicos, biólogos, etcétera. ¡Hasta de los periodistas, oye…!”.
“(…) ¿Por qué crees que después de la universidad y del matri (cidio), la mayoría de profesionales no pueden mantener los niveles de rendimiento de los recién egresados de las aulas?... ¿Por qué más va a ser, pues, cuñao?... Sólo aquellos que persisten en el estricto régimen de voraz consumo alcohólico pueden mantener los niveles intelectuales que obtuvieron durante sus años de estudiantes universitarios, ¿si o no, causita?... Después dicen que en el Perú se está perdiendo el potencial intelectual… Además, el alcohol aumenta el colesterol benigno, reduce la trombosis, una vaina llamada fibrinogen, aumenta la fibrinólisis (o lo que shusha sea) y reduce (sin duda) el espasmo arterial del estrés…”.
La noche que loreamos bravo y nos despedimos de Bueno, era tarde, los pirañas y drogadictos se habían apoderado de las calles del centro y un policía municipal vomitaba en la pileta de la Plaza de Armas. “La verdad, lo único que me interesa del sílabo es el curso ese sobre Relatividad de la belleza de la mujer según el nivel del alcohol”, alcancé a decirle. Habla, Bueno, ¿crees que me dejen entrar como alumno libre?, habla, chochera, de hecho me va a servir; hasta podría dar una charlita, mi humilde testimonio, aboganster, franco. Me matriculo nomás, ¿qué dices?, háblale al profe, causa, que me deje entrar...
La tarde en que Bueno llegó a matricularse en la maestría, jamás imaginó que el desarrollo del plan de estudios y su nuevo grado académico le resultarían gratuitos. Al recibir el sílabo se sintió reconfortado. Los cuatro cursos del primer ciclo serían para él –y en su modesta opinión de recién graduado como aboganster en una anónima y faltosa universidad- un paseo, pan comido, papayita, exceptuando las malditas matemáticas financieras que lo perseguían cada cierto tiempo en los cursos de especialización y en sus afanes de postgrado.
Origen de las parrandas I y El alcohol y su función como lubricante social, serán de lo más sencillo, pensó, acomodándose los anteojos oscuros (pa` que no sepan que está mirando). Pero si hasta Introducción a la jarra y el vaso, podría ser dictado por él mismo si alguien le daba el espacio para verter sus amplios conocimientos, experiencias múltiples y trabajos de campo.
Lo que le jodía de los cursos de los primeros meses de ese verano ardiente en Chimbote, era –definitivamente- el curso de Matemáticas financieras del bebedor. Cómo evitar pagar bebidas demás, cómo cobrar vueltos “olvidados” a los meseros, cómo calcular propinas, cómo meter “cabeza”, y otros... Él nunca supo sacar bien la cuenta (mucho menos dejar propina); desde sus inicios en el Oh qué bueno y El carro hundido, con la collera de la promo (de abogansters, claro), hasta sus últimas vueltas por El Pascualín, y sus cabeceadas en los bares del jirón Balta, siempre supo que ese sería su punto débil.
En el plan de estudios se encontró también con la relación de materias del siguiente periodo académico: Tragonometría I, El alcohol como sustituto del Psiquiatra (¿será posible?), Discusión I, Bebidas en la playa I (con tal que no sea la de Miramar, pensó), Introducción al manejo del tequila (ese sonaba nice), y un anodino Comidas y canciones que no combinan con el alcohol (¿?).
“El tratamiento primario comienza con el reconocimiento del alcoholismo como un problema que necesita atención específica, en vez de considerarlo secundario a otro problema subyacente como se hacía antaño. Se están desarrollando rápidamente residencias especializadas para su tratamiento y unidades específicas en los hospitales generales y psiquiátricos…”, alcanzó a leer en las revistas especializadas que se trajo de Lima en su último recorrido por el cardiólogo y por las fondas (culturosas) de Kilka, que finalmente le llegaron “a buen sitio”.
Sílabo en mano, los cursos del tercer periodo académico lo empezaron a preocupar. ¿Sería capaz de salir airoso de tamaña exigencia?... Tragonometría II, Importancia del cañazo en la toma de decisiones (¿estaba a punto de tomar una?), Logística y ubicación del trago, Consecuencias de conducir bajo efectos del alcohol (o sea cómo evitar que los mocosos esos egresados de la escuelita de Bellamar que ahora malconducen el tránsito te pongan multa) y Relatividad de la belleza de la mujer según el nivel del alcohol (ese sí que lo consideraba importante, imperdible).
A medida que avanzaba hacia su oficina en el jirón Leoncio Prado, pensó en el calor que hacía y en sus amigos de la noche anterior. ¿Y si les timbraba para un cebiche?... Recordó que el año anterior, cuando intentó asistir como alumno libre al curso de Técnicas avanzadas de cómo ocultar el tufo (o sea cómo hablar e inhalar al mismo tiempo), un cebichito con los viejos amigos de su insulsa promo del Raimondi le impidieron matricularse. Del pescado a la botella hay escaso trecho –pensó- y había que retomar la idea de salir airoso de los nuevos retos en materia académica.
Al llegar a su oficina, las secretarias y practicantes lo observaron con molestia. Una de ellas soltó una risita al tiempo que esparcía en el ambiente un poderoso ambientador. Volvió a bajar las escaleras; al llegar a la puerta del edificio sucedió: “Puta, Bueno, ya ni te dejas ver, chochera. ¿Dónde te vas?... Qué te has creído, oye… ¿Qué?, ¿o sea que porque ahora te codeas con la crema de la jurisprudencia, que andas con los encorbataos esos de medio pelo en el Piyéik (o sea PJ), ya ni tiempo tienes para tu gente, para tu mancha (triste y galvista), para tus patas de promo?... ¿qué?, ¿o sea que…?, a pux…
Terminaron en El Charly. “Tres meses promoción, tres meses he estado al margen; pero he vuelto entero, ¿no me ves?... Lima ya no me aguantaba, causa, tiempo que quería venirme; felizmente acá estoy, uno siempre extraña a la collera, y además el sitio ese donde me tenían encerrado y en “tratamiento”, la verdad que me jodía; hasta granos me empezaron a brotar en la nuca por el tiempazo que estuve adentro... ¡Salud, promoción…! ¡Mozo, tráete cuatro de una vez!... Como verás, yo ahora sólo me preocupo de mi maestría; manya, acabo de matricularme. Con el nuevo grado ya nadie me joderá…”.
La tarde se hacía noche mientras Bueno hablaba de la importancia de invertir en postgrados como el suyo: “Todo se ha globalizado, causa, hay que estar a la vanguardia. Se invierte, pues, pero qué se hace; tiempo, dinero, la vaina es estar actualizado y ser competitivo. ¿Si o no?... Yo lo primero que he visto ha sido la plana docente, el nivel que tienen, su experiencia profesional. Ahora, qué me iba yo a imaginar que terminaría enseñando algunas materias; será la vida, pues, será mi karma; ni cojinova que fuera para negarme yo a dictar, sobre todo si me va a salir gratis la vaina ésta… ¿Que qué sé yo de metodología?, ¿Qué hay que capitalizar la experiencia de los alumnos y del profesor?, ¿Qué cuántos egresados pienso insertar en el mercado laboral?...
La noche se apoderó de El Charly y las desinhibidas chicas de su vasto catálogo empezaron a abandonar su centro de trabajo. ¿Adónde nos vamos, chochera?, habla, pues… Y la gente, la promo, los cojuditos que lo habían seguido desde su insulsa oficina, apostaron por continuar la charla en el Chissita…
“El consumo excesivo de alcohol, como todos saben, destruye las neuronas, pero naturalmente ataca a las neuronas más lentas y débiles en primer lugar (si, claro). En este sentido, el consumo regular de cerveza elimina las neuronas más débiles, haciendo constantemente del cerebro una máquina más rápida y eficiente (caray). El resultado de este profundo estudio epidemiológico verifica y valida la relación causal entre las trancas de fin de semana y el rendimiento de los matemáticos, sociólogos, ingenieros, historiadores, escritores, médicos, abogansters, psicólogos, pintores, músicos, biólogos, etcétera. ¡Hasta de los periodistas, oye…!”.
“(…) ¿Por qué crees que después de la universidad y del matri (cidio), la mayoría de profesionales no pueden mantener los niveles de rendimiento de los recién egresados de las aulas?... ¿Por qué más va a ser, pues, cuñao?... Sólo aquellos que persisten en el estricto régimen de voraz consumo alcohólico pueden mantener los niveles intelectuales que obtuvieron durante sus años de estudiantes universitarios, ¿si o no, causita?... Después dicen que en el Perú se está perdiendo el potencial intelectual… Además, el alcohol aumenta el colesterol benigno, reduce la trombosis, una vaina llamada fibrinogen, aumenta la fibrinólisis (o lo que shusha sea) y reduce (sin duda) el espasmo arterial del estrés…”.
La noche que loreamos bravo y nos despedimos de Bueno, era tarde, los pirañas y drogadictos se habían apoderado de las calles del centro y un policía municipal vomitaba en la pileta de la Plaza de Armas. “La verdad, lo único que me interesa del sílabo es el curso ese sobre Relatividad de la belleza de la mujer según el nivel del alcohol”, alcancé a decirle. Habla, Bueno, ¿crees que me dejen entrar como alumno libre?, habla, chochera, de hecho me va a servir; hasta podría dar una charlita, mi humilde testimonio, aboganster, franco. Me matriculo nomás, ¿qué dices?, háblale al profe, causa, que me deje entrar...
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