Onetti no sólo no llegó a los cien años; tampoco pisó Montevideo desde que se exilió de la dictadura uruguaya en 1975 y permaneció en Madrid hasta su muerte en 1994. Pero en su ciudad natal igual decidieron declarar a este 2009 como el año Onetti y las novedades surgidas acerca del autor de El astillero han justificado el nombramiento. Primero su hija María Isabel donó a la Biblioteca Nacional de Montevideo el texto, inédito y sin terminar, de su padre El último viernes. Después el chileno Hugo Verani anunció el descubrimiento de 67 cartas inéditas que el por entonces joven escritor y periodista uruguayo le envió entre 1937 y 1943 al pintor argentino Julio Payró. Y, por último, se publicará el tercer tomo de sus obras completas, que incluye todos los textos que publicó en periódicos y revistas –doce de ellos inéditos–.
Onetti consolidó su literatura a través del fracaso. La soledad, la tristeza y la derrota fueron la base de sus textos. Paradoja: el fracaso lo llevó a convertirse –como lo sugiere el cartel colgado en el Teatro Solís en la capital uruguaya, que dice: “Onetti es Montevideo”– en el gran triunfador de la literatura de su país en el siglo XX. Para ver la nota completa clickea aquí.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
only write