Maribel de Paz*
Lo que más sorprende son los verbos. En los versos rescatados de un baúl en casa de Cecilia Heraud, hermana del vate muerto en Puerto Maldonado, aparecen palabras como escupir, devorar, arrojar, vomitar, manchar. No es que el resto de la poesía de Javier Heraud pueda tildarse de bucólica. Ciertamente siempre han estado allí los machetes, los fusiles y martillos, y la intensidad de "las cicatrices abiertas". Los versos del poeta guerrillero que aparecen ahora en imágenes inéditas de su puño y letra en el libro Viajes imaginarios (Editora Mesa Redonda, 2008) son, sin embargo, de un ímpetu distinto. Más visceral, cabría decir.
La obra, que llega junto con la reedición de Estación reunida, incluye un dossier gráfico con fotos nunca antes publicadas y compiladas por Herman Schwarz. También, prólogo del poeta y crítico literario Edgar O'Hara, y lo más llamativo: la versión facsimilar de la revista Ágape, cuyo único ejemplar manuscrito realizaron en 1959 Heraud y Hernández. Allí se incluye un poema de cada uno de los vates, el poema de César Vallejo que da nombre a la publicación, y la "Nota sobre las variaciones surrealistas a través de los sueños de un hombre cualquiera".
"Cuando Edgar se puso en la misión de hacer una edición con los manuscritos de Heraud le pidió a Cecilia, la hermana del poeta, que abra todos los cajones, y así encontraron este poema inédito", explica Schwarz sobre la aparición de esta revista que en su contratapa indica: edición limitada a un ejemplar para la dirección, o sea, para Heraud y Hernández.
Sin embargo, más allá de lo llamativo que pueda resultar el hallazgo de estos versos, quizá lo más importante sea la comprobación del estrecho vínculo creativo que existió entre Heraud y Luis Hernández a partir de su encuentro en la Universidad Católica. Vinculación que se traduciría, como se indica en estas obras, en una especie de conversación a través de sus poemas. Así, a las palabras de Heraud en su "Arte Poética" fechada en Madrid 1961 y La Habana 1962 ("Y la poesía es entonces / el amor, la muerte, / la redención del hombre"), Hernández respondería en 1965 con estos célebres versos: "Solitarios son los actos del poeta / Como aquellos del amor y de la muerte". Conversación más allá de la muerte entre dos grandes de la generación del sesenta. Como diría O'Hara: entre Hache y Hache.
* Tomado de Caretas. La foto es del poema inédito de Heraud y del "Soneto" de puño y letra de Hernández. ( la leyenda es también de Caretas )
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
only write