Novela de Roberto Bolaño será la próxima adaptación en la pantalla grande, señala el blog Nuvolaglia, de Óscar Pita-Grandi
La literatura volvió a remecer la pantalla grande. El primero en desfilar este año fue Cormac McCarthy, laureado escritor norteamericano que trabajó junto a los hermanos Coen en la adaptación de “No es país para viejos” (No country for old men”), indiscutible ganadora de la reciente noche del Oscar. McCarthy, considerado un clásico vivo por la crítica especializada, obtuvo el Pulitzer de Literatura en 2007 por su novela “La Carretera” (“The Road”), una apocalíptica historia contemporánea narrada con el corazón en las manos.
Luego del éxito taquillero de “No country…”, el rodaje de “La Carretera” era inminente. Viggo Mortensen, el mafioso ruso de “Promesas Lejanas” (“Eastern Promises”, Cronemberg), es quien encarna al padre errante con su hijo por un país de destrucción.
De otra parte, el Nobel portugués Saramago ha confesado estar a gusto con la adaptación fílmica de su obra “Ensayo sobre la ceguera”, que apreció en función privada. Otra novela trasladada al cine y todavía ausente entre nosotros es “Seda” de Baricco, una fabulosa y breve novela. Sé que es una producción multinacional dirigida por el canadiense François Girard, y que dura casi dos horas. ¿Cómo habrán hecho para no romper el encanto de aquella profunda brevedad? No obstante me animo a afirmar por la trascendencia de su autor en la literatura Latinoamericana, que la ganadora del Premio Herralde 1998, “Los Detectives Salvajes”, será la película más esperada por los nostálgicos lectores de Roberto Bolaño. Nostálgicos y rabiosos que van in crecendo ahora que la han traducido al francés y al inglés.
Según publican en Festival Central, la novela del reputado escritor chileno Roberto Bolaño “Los detectives salvajes” será trasladada al cine en una producción mexicana en la que han de participar Cadereyta, Mantarraya Producciones y Catatonia Films, a las que podría sumarse también la chilena MC Films. La película vendrá avalada por el productor Jaime Romandia, colaborador habitual del aclamado cineasta Carlos Reygadas, en tanto que la dirección ha recaído en Carlos Sama (“Sin ton ni Sonia”). Su intención es que el reparto reúna actores latinoamericanos.
Pensar en el traslado a la pantalla de “Los Detectives Salvajes” obliga a plantearse un mar de cuestiones de orden argumental y técnico. Cómo resolverán el diario del adolescente Juan García Madero, vital en el libro. La polifonía o los múltiples narradores que recuerdan a Rashomón. La fragmentación que es quien marca los latidos durante los años de pesquisa, generando una especie de alegoría literaria. Acción sí que van a encontrar; aunque los tiempos novelados parecieran anularla por momentos. Esperemos a ver la adaptación para salir de dudas al respecto de esta joya del neorrealismo barroco, una novela contemporánea vuelta un clásico influenciador por la crítica, y que muchos la comparan con aquella sensación cortazariana llamada “Rayuela”.
Por sus abundantes páginas corren las vidas de dos jóvenes poetas y ocasionales vendedores de drogas, Arturo Belano y Ulises Lima, en busca de la poeta fundadora del grupo real viscerrealista, Cesárea Tinajero, desaparecida en los años treinta. Imposible evitar voltear a ver el Impala que transporta a los poetas y a Lupe, la prostituta, levantando polvo por el desierto de Sonora. Esperemos pero no en calma, pues nada en Bolaño (Belano) oculta calma, solo su apariencia. Y lo mejor es hacer como García Madero en referencia a Arturo Belano:
“Según él, los actuales real viscerrealistas caminaban hacia atrás. ¿Cómo hacia atrás?, pregunté.
-De espaldas, mirando un punto pero alejándose de él, en línea recta hacia lo desconocido.
Dije que me parecía perfecto caminar de esa manera, aunque en realidad no entendí nada. Bien pensado, es la peor forma de caminar.”
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
only write