Pizarnik, figura clave del siglo XX, y con aureola de poeta de culto acrecentada por su suicido a los 36 años, en 1972; publicó este texto sobre la vampira en 1971, y aunque al principio iba a ser una crítica de la obra homónima de Valentine Penrose, acabó siendo uno los textos más importantes de la autora de El infierno musical. Atraída por el monstruo, Pizarnik inicia este bello y convulso libro con citas de Sade, Artaud o Sartre que dice "El criminal no hace la belleza; él mismo es la auténtica belleza", y la autora añade: "la perversión sexual y la demencia de la condesa Báthory son tan evidentes que Valentine Penrose se desentiende de ellas para concentrarse exclusivamente en la belleza convulsa del personaje".
Con una prosa muy poética, la escritora argentina va relatando los episodios de esta condesa que durante seis años se dedicó a cortar venas y arterias de jóvenes doncellas a las que tenía meses en las celdas y salas de torturas de su castillo. El libro se presentará en Barcelona y Madrid a fines de este mes.
béthory, prefiero a la banda de hardcore
ResponderBorrark.